Ismael Serrano pierde la paciencia y confiesa su cansancio por el apodo que lo persigue hace 24 años

Más de dos décadas después de su debut, Ismael Serrano admite que no encontró un lugar fijo para demostrar la faceta que más le gusta de la música. Es un nivel de autoexigencia quizás comparable a la de Joaquín Sabina u otros poetas impenitentes que buscan su mejor versión, aunque lo que más descontenta al cantautor madrileño es el prejuicio. La opinión artística de las grandes cadenas, como recientemente criticó a “Radio 3” por darle más espacio al trap, le molestan mucho.

El autor de “Ahora que te encuentro” confesó su hartazgo por ser tildado como un “músico triste”, pues él defiende que este tipo de sentimientos son parte de la vida. Desafía a la crítica con “La canción más triste del mundo” para escaparle a este cuestionamiento habitual en su obra musical, mientras que además defiende que sus canciones han servido al público para salir adelante en los tiempos más oscuros de la pandemia. Tiene un gran apoyo entre sus fanáticos, y así lo demuestra el nivel de ventas que obtuvo en Barcelona y Madrid: las entradas se agotaron. La próxima parada será Gijón, aunque existe una gran expectativa por su visita a San Sebastián a principios de noviembre.

Tiene que haber un espacio para la tristeza.

Las letras de los trovadores como Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina y más recientemente Ismael Serrano, suelen despertar los sentimientos melancólicos que los fanáticos de la música guardan en el fondo de su ser. No se trata de un camino que necesariamente haya buscado el autor de “Amores imposibles”, debido a que nunca tuvo claro la persona o músico que pretendía ser. Señala a “Cadena Ser” que esta búsqueda personal la podemos ver en el próximo documental que presentará, indagando cuál es el motor artístico para componer estas canciones “tristes”. Siempre estará de este lado del charco, y muy lejos del trap que suplanta a otros géneros. Una de sus mayores inquietudes es el lugar que le está quedando al indie, y por ello le envió un mensaje a los colegas de este género.

El mensaje fue precisamente dirigido hacia “Radio 3”, un programa al cual acusa de bajar la calidad musical. En defensa de los jóvenes o bandas de sellos independientes, los defiende asegurando que los recibiría “con los brazos abiertos”, según “La Ganzúa”. En este grupo también entran los periodistas como Julio Ruiz, que defendían al género indie, y que se quedaron sin un programa propio por las directrices de la emisora mencionada. En esta época de nueva normalidad, la industria puede que se haya modificado y el cantautor madrileño lo sabe. Tal como Ismael Serrano lo advierte en “Seremos”, se está haciendo difícil el proceso de readaptación a la vida que antes conocíamos, pero la música sigue emocionando por “reivindicar” que siempre habrá futuro.

Cuando publicamos el videoclip de “Porque fuimos” me escribía gente diciendo que era emocionante.

El artista internacional lanzó esta canción y significó una verdadera bocanada de aire fresco para los fanáticos de la música, según “Cadena Ser”. Al mismo nivel de lo que significó “Resistiré” en tiempos de confinamiento, o bien “Quién me ha robado el mes de abril” de su querido Joaquín Sabina. Ismael Serrano asegura que el final del video con la gente abrazándose fue mágico y emotivo. La respuesta al resto del disco también ha sido buena. “Europa Press” precisa que cuenta con Pablo Alborán, Jimena Ruiz Echazú y otros artistas como colaboradores. El público espera que alguna vez cante con estas leyendas en vivo, aunque por el momento sea difícil que en las visitas al País Vasco se sume alguno. Puede que en el show del Teatro Alcalá, previsto para el 13 de noviembre, nos encontremos con alguna sorpresa por estar en Madrid.