Histórico

La llamada de Isabel Preysler que habría condenado a Miguel Boyer a su mayor arrepentimiento

El execonomista tenía dos planes que desechó abruptamente.
domingo, 10 de octubre de 2021 · 04:15

Los romances entre políticos y famosas de la farándula nunca estuvieron bien vistos para la sociedad, y mucho menos para los gobernantes de turno. Por ello, Miguel Boyer e Isabel Preysler asumieron tantos riesgos en su relación que el economista parecía casi decidido a abandonar esta aventura. Debían encontrarse a escondidas, entre las fiestas de amigos comunes como María Asunción García Lomas; pero finalmente el socialista cayó rendido a los pies de la filipina.

El histórico dirigente del PSOE tenía pensado retomar su matrimonio con Elena Arnedo, hasta que la madre de Enrique Iglesias lo llamó y decidió arriesgarse por su amor. Vivía horas de muchísima presión en la sede de Ferraz, debido a que otros referentes de peso como Alfonso Guerra estaban presionando por su dimisión. Felipe González afrontaba una tormenta política “por culpa” del futuro padre de Ana Boyer, y sin embargo, los sentimientos del economista por la socialité fueron más fuertes. Ella también describió esta historia de la misma manera. El “corazón” pudo más que la cabeza, pues realizó un cambio abrupto de vida al apoyarlo en su dimisión.

Isabel Preysler y Miguel Boyer.

Quienes piensan que no existe un ámbito de mayor exposición amorosa que el mundo de los espectáculos, olvidan que detrás de la relación de Miguel Boyer siempre estuvieron los servicios de inteligencia. Emilio Alonso Manglano reconoció recientemente que estuvo tras los pasos de la pareja, debido a que “La China” inquietaba a Felipe González y partido. Como precisa “ABC”, el expresidente del PSOE estaba por darle una vicepresidencia al futuro esposo de Isabel Preysler, pero la reafirmación del romance impidió que prosperara ese plan. El amor que sentían era tan indestructible que realizaban escapadas amorosas a París, bajo la intención de no ser descubiertos.

Felipe González, Alfonso Guerra y Miguel Boyer.

Lo que hacía a este romance de película era que el exministro de Economía llevaba como pseudónimo falso el apellido “García”, según “El Cierre digital”, debido a que ni siquiera confiaba en quienes lo recibían en la ciudad de las luces. En aquel momento, algunos allegados aseguraban que sólo Felipe González conocía este romance secreto, pero alguna filtración despertó las alarmas de la prensa. Se tasó en ocho millones de pesetas una simple fotografía de ambos, por lo que la presión que sentía el político fallecido era considerable. Miguel Boyer hizo las valijas para retomar la convivencia con su primera esposa, Elena, e imprevistamente recibió una llamada de Isabel Preysler que llevaba una promesa. Las ilusiones de la madre de Miguel y Laura Boyer se echaron a perder.

Isabel Preysler y Miguel Boyer en una de sus últimas fotografías.

Lo había llamado “La China” para decirle que no podía vivir sin él.

Eran las palabras que probablemente necesitaba en aquel momento. “La reina de los corazones” fue inteligente al llamarlo en el momento adecuado, y así torcer la decisión del exdirigente socialista. Miguel Boyer fue a vivir con su hermano por unos días, porque ya tenía claro que Isabel Preysler le pediría el divorcio a Carlos Falcó, según “ABC”. Fue la ficha de dominó que terminó de sellar su futuro sentimental, y también político. Alfonso Guerra presionó para que “el superministro” de la recuperación económica postfranquista no continúe, y rodeado por las presiones políticas, el exdirigente nacido en Francia dimitió. De un momento a otro, se quedó sin familia ni trabajo en la función pública, aunque logró la gran hazaña de su vida. La madre de Enrique Iglesias se mudó a su casa, una decisión que describiría como un “piscinazo” al vacío, de acuerdo a “Diez Minutos”. Pero lo cierto es que fue el amor más largo que ambos mantuvieron, con un casamiento de por medio y un cambio de vida considerable. El economista pasó a trabajar para el sector privado, mientras que ella se hizo una persona más discreta por la posición de su esposo.

Cargando más noticias
Cargar mas noticias