La desesperación de la Reina Letizia ante el evidente problema genético de sus hijas, Leonor y Sofía

De la Reina Letizia se dice que ha atravesado por unos cuantos procedimientos quirúrgicos, que le han permitido mostrar una mejor versión estética de sí misma, y por mucho que le hayan servido para ser una radiante Consorte en su casi medio siglo de vida, una máxima de la naturaleza humana prevalece: la perfección no se hereda y precisamente esto es lo que ha pasado con sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía.

Hoy en día, la heredera y la benjamina de Casa Real son dos adolescentes y, aunque despiertan la admiracón de la prensa internacional y marcan tendencias en suelo nacional a nivel de estilo y saber estar, para la esposa del Rey Felipe, más que evidente ha sido un defecto físico que desdibujó por varios años la innegable belleza de sus hijas, quienes, para su mayor lamento, deben crecer bajo el incesante brillo de los flashes a su alrededor.

Pudiera la impetuosa Consorte culpar a la genética borbónica: la Reina Sofía es la primera en padecer esta condición y luego, el Rey Felipe también arrastra este lastre hereditario, que tampoco se esforzaron en corregir y contrasta sobremanera con su agraciada herencia helénica.

Se trata de la dentadura. En el caso particular de la Princesa de Asturias, quizás fue más agravado que el de su hermana Sofía, aunque ambas presentaban alguna alineación irregular en la línea dental. Atenta a esta particularidad, la crisis sanitaria del 2020 y el uso de mascarillas significó para la Reina Letizia una oportunidad más que única para someter a sus hijas a un procedimiento y, sea cual haya sido, les quedó de mil maravillas, pues en poco tiempo la sonrisa de la Princesa Leonor y la Infanta mejoró significativamente.

Por supuesto, no es que la Reina Letizia pueda "eludir" cierta responsabilidad en este tema, tomando en cuenta que basta indagar un poco en internet y la raíz del problema también la apunta a ella. En fotos de archivo, se comprueba que la Monarca también usó brackets, aunque aquellos tipo "transparentes" que se supone no se notan demasiado.

Desde portales como "Cotilleos" se cuestiona el por qué el tema del cuidado dental nunca fue un asunto de atención para los Borbones, pues precisamente no carecen de recursos para someterse a tratamientos estéticos que les permitan tener una imagen mejorada y son figuras públicas, representantes del Estado español.

Desde la visión de la Emérita Sofía, tener o no unos dientes resplandecientes nunca le impidió gobernar y ganarse el cariño de los españoles. Además posee un diente de oro que entorpecería cualquier tratamiento, pues esto podría implicar removerlo, y posiblemente ella no esté interesada y el caso del Rey Felipe es verdaderamente un misterio, considerando lo incisiva que puede ser su esposa cuando una idea se fija en su cabeza.

Pero, en caso de que ambos quieran replantearse las cosas, la Reina Letizia puede dejarlos en manos de grandiosos profesionales dispuestos a terminar de una vez por todas con esta situación, aunque en lo que a ella y sus hijas se refiere, el camino está muy adelantado ¡y vaya que les ha ayudado a verse mejor que nunca!