EXTRAÑO

Charlène de Mónaco no para de sumar polémicas y una nueva decisión la pone en una situación delicada

La Princesa pasa de una fuerte recuperación a ser embajadora de buena voluntad del reino Zulú en días.
viernes, 8 de octubre de 2021 · 21:14

Si bien la princesa Charlène de Mónaco ha tenido, durante varios años, serios problemas para encontrar su lugar en el Principado europeo, pues pareció nunca poder adaptarse bien, resulta evidente que, en Sudáfrica, todo es completamente distinto, aunque permanece allí forzosamente debido a problemas de salud ya conocidos.

Pero, ya en vías de recuperación, Charlène de Mónaco ha encontrado una nueva razón que la impulsa a acelerar su proceso de recuperación, pues se ha ofrecido para actuar en calidad de mediadora en los conflictos familiares de la familia real Zulú.

Charlène de Mónaco ha reaparecido e intenta volver a la normalidad.

Recordemos que, desde el fallecimiento de su gran amigo, el Rey Zwelithini Goodwill, el trono sigue vacío y la lucha de sus herederos por ocuparlo ha traído un saldo sangriento, marcado por desapariciones, incriminaciones por homicidio y otros delitos condenables.

Pero esta agravada situación no parece inmutar a la madre de los príncipes herederos, Jacques y Gabriella, así que  ha escogido permanecer del lado de uno de los pretendientes a la corona. Se trata del príncipe Misuzulu, el hijo mayor de la tercera esposa de Goodwill, la reina Mantfombi Dlamini. (Con información de la revista “Lecturas”).

En esta cuenta de Instagram @the_african_royal_families se difundió la última foto de Charlène de Mónaco y el Príncipe Misuzulu.

Por esta razón, dos fotografías han trascendido en las últimas horas. En una de ellas se aprecia a Charlène de Mónaco junto al Príncipe y, en otra, se la ve vestida con una camiseta en cuyo diseño aparece la foto de Misuzulu. Estas instantáneas fueron posteadas en una cuenta de la red social Instagram dedicada a presentar a las diversas casas reales del viejo continente. Allí, se describe el encuentro entre el Zulú y la exnadadora.

Su Majestad el rey Misuzulu del reino zulú se encontró con Su Alteza Serenísima la princesa consorte Charlène de Mónaco. Ella ha estado en Sudáfrica desde marzo, recuperándose después de una operación. Era una amiga cercana del rey Goodwill Zwelithini y asistió a su funeral. La princesa Charlene es la royal europea más cercana a cualquier royal africano. Nacida en Zimbabue y criada en Sudáfrica, fue nadadora olímpica, representando a su patria, Sudáfrica. Aunque no sea negra, se la considera la primera africana moderna que se casó en la realeza europea.

De hecho, Charlène de Mónaco fue la única royal europea que asistió a las exequias del Rey Zulú Zwelithini Goodwill.

Pese a su buena voluntad por ayudar a que la paz vuelva al entorno familiar de los zulúes, los encuentros entre Charlène de Mónaco y el Príncipe Misuzulu han dejado en evidencia un inusual e inesperada particularidad que no ha sido descuidada por los detractores de la exatleta: ella habla isizulu, el idioma oficial del pueblo zulú y uno de los once idiomas oficiales que coexisten en Sudáfrica.

¿Y qué problema podría haber con ello? Podría creerse que, al ser nativa de Sudáfrica, resulte admirable que haya acogido otros idiomas aparte del inglés que es su lengua materna. Pero, al ser notoria la complejidad que presenta el dialecto que manejan unas 11 millones de personas, nadie se explica, por ejemplo, cómo es que tuvo tantas complicaciones para aprender el francés cuando decidió unir su vida a la del Príncipe Alberto.

Sin embargo, esta podría ser una muestra más del amor que Charlène de Mónaco siente por su país, que es incomparable en contraste con la relación que siempre tuvo con el pequeño país europeo, que en alguna ocasión llegó a catalogar como un “nido de tiburones”.

Cargando más noticias
Cargar mas noticias