Mila Ximénez, sin fuerzas y con ayuda para caminar en su última visita al hospital

El pasado junio de 2020, Mila Ximénez confirmaba la peor noticia en "Sálvame", cuando, vía comunicación telefónica debido a la pandemia, anunció que padecía cáncer de pulmón. 

Desde ese momento, los colaboradores se volcaron enteramente en su compañera y la acompañaron, en la medida que pudieron, en ese momento tan complicado, no solo por eso, sino por el coronavirus, que acechaba en cada rincón del país (y del mundo), por lo que Mila Ximénez no pudo recibir personalmente toda la contención que hubiese podido recibir sin este virus dando vueltas.

Varias veces, Mila Ximénez ha hablado sobre su estado de salud y lo difícil que le está siendo el tratamiento, pues la quimioterapia le quita las ganas de retomar sus actividades y la deja tirada en su cama. Así lo expresó ella misma en alguna ocasión. 

He estado en la cama casi un mes, sin poder moverme. Lo que he pasado este mes no se lo deseo a nadie. Yo tengo mucha fuerza pero cada vez me cuesta más sacarla y me cuesta más levantarme. Todo esto me ha pillado cansada.

"Cansada", una palabra que ha repetido en reiteradas oportunidades cuando le preguntan cómo se siente, y así se la pudo ver a la salida de la clínica madrileña La Luz, en donde empezó un nuevo tratamiento que trae renovadas esperanzas a la colaboradora de "Sálvame".

Sin embargo, en su salida del hospital, se pudo ver a Mila Ximénez y a sus hermanos, Manolo y Concha, con un semblante serio y de preocupación, generando dudas con respecto a este nuevo proceso para combatir su enfermedad.

En las imágenes se puede ver a una Mila Ximénez agotada, caminando con ayuda de sus consanguíneos, quienes la sostenían para que no se cayera por la falta de fuerzas que le provoca cada nueva sesión de su tratamiento. 

Sus hermanos están siendo el pilar fundamental en estos difíciles momentos en los que la comunicadora no cuenta con la presencia de su hija, Alba Santana, quien vive en Amsterdam con sus hijos y su pareja. 

Alba ha estado acompañando a Mila Ximénez en distintas etapas de su enfermedad, pero, por razones lógicas, no puede viajar, aunque lo hace cada tanto para visitar a su primogénita, como en el verano, cuando llegó al país para estar su lado.