DEL OTRO LADO DEL CHARCO
La casa de la discordia de Rocío Jurado en Miami que desencadenó el enfrentamiento familiar
La madre de Rocío Carrasco viajaba a menudo al país americano.
Desde que Rocío Carrasco reapareció con nada más y nada menos, que un documental, al que tituló "Rocío, contar la verdad para seguir viva", se han hablado de diferentes temas que involucran a la hija de Rocío Jurado, sobre todo acerca de su exesposo y padre de sus dos hijos.
Antonio David Flores fue (al parecer, seguirá siendo) el protagonista indiscutible de esta docuserie, en la que Rocío Carrasco desvela cómo fue su relación con su expareja, con sus hijos y por supuesto con su madre, Rocío Jurado.
Lo que más impactó a algunos de los episodios emitidos hasta el momento, fue una pregunta que Rocío Flores le hizo a su madre luego de que "La Más Grande" falleciera, pues con solo 9 años, nadie pudo creer la actitud de la niña después de lo ocurrido el 1 de junio de 2006.
Mamá, ¿ahora qué va a pasar con las casas de Miami?
Tras esta pregunta, se generaron dudas con lo que de verdad sucedió con la casa de Rocío Jurado en Miami. Ortega Cano asegura que a la fecha del fallecimiento de la Jurado "solo quedaba una propiedad en Miami".
El portal "Vanitatis" es quien desmiente esta información tras hablar con miembros de la familia, afirmando que eran dos los bienes que Rocío Jurado tenía en Florida, desde el medio anteriormente mencionado lo confirmaron.
Estuvieron muy bien vendidas, fueron dos operaciones satisfactorias y en cuanto a la que compartía Rocío Jurado con Ortega Cano, es falso que hubiera discrepancias entre la heredera y el propietario del otro 50%.
La propiedad que Rocío Jurado tenía con Ortega Cano era un apartamento en el edificio Capobella. Tres habitaciones, comedor, zona de servicio, baños y un gran salón con vista al mar fue suficiente para la cantante, quien en varias ocasiones se presentó en el hotel Fontainebleau, que quedaba cerca de su hogar.
Además, tenía piscina, seguridad privada, acceso a la playa y una gran terraza que daba la vuelta a la vivienda, en donde Rocío Jurado ha pasado gratas veladas nocturnas con sus invitados.
La venta, según Vanitatis, se efectuó por 870.000 dólares, 5 mil menos que el precio de compra, pero fue suficiente para que la propiedad de Rocío Jurado se vendiera finalmente.
