La gélida bienvenida que el Príncipe Carlos planea para su hijo, el Príncipe Harry, en Reino Unido

Bien dicen que "guerra avisada no mata soldado" y el Príncipe Carlos, hijo de la Reina Isabel, está tomando todas las previsiones del caso, conforme a la cercanía de la fecha más esperada por los hijos de Lady Di, el Príncipe Guillermo y el Príncipe Harry.

El próximo 1 de julio será desvelada la esfinge conmemorativa del 60 aniversario de la Princesa de Gales, y se prevé que el Príncipe Harry y su hermano asistan a este encuentro, que tendrá lugar en los jardines del Palacio de Kensington. Sin embargo, otros sucesos están aconteciendo tras bambalinas y así lo reporta "MDZ".

El padre del Príncipe Harry decide abrirse paso en esta celebración -según reporta el diario británico "The Sun"-, y cuando decimos abrirse, es que, para la fecha mencionada, ni siquiera estará en Reino Unido. Preferirá refugiarse en su finca ubicada en Balmoral, Escocia, y razones no le faltan, pues a razón del medio citado, no son una sino dos y una tiene que ver directamente con el Duque de Edimburgo.

Por supuesto que para muchos resultaría contraproducente la presencia del Príncipe de Gales en un memorial dedicado a la Princesa del Pueblo, por la triste historia que ya todos conocemos, pero en lo interno y familiar aún quedan ciertos temas no resueltos entre Carlos y el Príncipe Harry.

Personas allegadas al heredero de la Reina Isabel, confirman que en sus sentimientos con respecto a su hijo no alberga rencor alguno, pues no es un hombre que guarde resentimientos, pero sí que siente una gran decepción por el comportamiento que el Príncipe Harry ha sostenido ante los medios tras sus últimas apariciones televisivas, donde el blanco evidente ha sido el ataque a su figura como padre.

Así que lo mejor para todas las partes es mantener las sanas distancias pues aún las heridas no sanan. Contrario a las especulaciones difundidas por algunos medios locales, se presume que el Príncipe Harry volaría a finales de este mes de junio a su país natal, a fin de cumplir con las medidas sanitarias impuestas en Reino Unido que contemplan un aislamiento preventivo de varios días.

Sin embargo, no hay una logística demasiado rigurosa en cuanto al desarrollo de este significativo evento. De hecho, el rotativo "The Sun" lo destaca de la siguiente forma:  "Los muchachos saldrán juntos por respeto a su madre. No ha habido charlas personales o charlas adecuadas, solo un intercambio muy breve y mínimo de mensajes de texto. La relación todavía es muy tensa y no hay señales de que haya algún tipo de unión en el corto plazo".

Así que el Príncipe Carlos dejará que sus hijos hagan lo suyo con respecto a la ceremonia prevista en honor a su madre, y permanecerá en Balmoral todo el tiempo prudente necesario, a fin de evitar cualquier encuentro ocasional o planificado con el menor de sus hijos.

Mientras tanto, el Príncipe Harry deberá confrontar nuevamente una circunstancia que no parece haber mejorado desde el funeral de su abuelo Felipe de Edimburgo: seguirán las permanentes tensiones entre él y los Windsor, en solitario y sin el apoyo de Meghan Markle.