Las tragedias sentimentales que marcaron la vida de Eugenia, la hija de Bertín Osborne

Mientras Bertín Osborne intenta acomodarse a la soledad propia de su separación con Fabiola Martínez, Eugenia, una de sus hijas, emprende el mismo camino. 14 años son los que ha durado su matrimonio con Juan Melgarejo y, ahora, el futuro ya no parece ser con ellos de la mano, tal como ha manifestado ella en su cuenta oficial de Instagram. Con el objetivo de intentar preservar al máximo la intimidad de su vínculo y a sus hijos, la muchacha ha asegurado que esa será toda la información que brindará al respecto y ha pedido encarecidamente que se respete esa determinación.

En octubre es el casamiento de Claudia con José Entrecanales, otra de las mujeres de la familia, y si bien ese festejo se presenta como una posibilidad para que el panorama se aclare para todos y comience a ser mejor, hay quienes creen que las emociones de los principales allegados a la novia podrían llegar a empañarlo todo. Sin embargo, y lamentablemente, no es la primera vez que el retoño mayor de Bertín Osborne debe enfrentarse a situaciones adversas y dolorosas, de modo que tendrá herramientas como para no permitirse arruinar el gran día de su hermana.

El divorcio es la novedad actual, pero en el pasado, la influencer ha tenido que enfrentarse a serios varápalos, incluso más complejos y angustiantes que la disolución de un vínculo romántico. Por un lado, el fallecimiento de su madre cuando ella era una jovencita y, luego, la muerte de una de sus hijas gemelas; ambos sucesos trágicos que también marcaron para siempre la vida del presentador de televisión, que les han servido a ambos para observar todo desde una perspectiva más profunda y también para afianzar su entrañable vínculo.

En esta instancia vale destacar que Bertín Osborne ha asegurado en más de una oportunidad que Sandra Domecq, la madre de sus hijas, fue el gran amor de su vida y que si se hubiesen casado cuando ambos eran más maduros, su historia no hubiese terminado en una separación. Aquellas han sido pérdidas fatales e irreparables para Eugenia y puede que también funcionaran como los motores de su búsqueda profesional.

Los ánimos de la familia de Bertín Osborne parecen estar inundados de desamor, pero, mientras tanto, Claudia continúa con sus planes nupciales, quizás porque guarda la esperanza de que aquel festejo llegue para acariciar los castigados corazones de sus parientes. Las celebraciones siempre son un buen motivo para el reencuentro y el disfrute, de modo que es muy probable que no estén dispuestos a desaprovechar la oportunidad, mucho menos ahora que finalmente la pandemia no es un impedimento.