La ayuda que Freddie Mercury le dio a Brian May y cambió para siempre su carrera solista

Uno de los desafíos más grandes en cualquier equipo de trabajo, tiene que ver con mantener los egos de los integrantes por debajo de un nivel que les permita a todos lucirse, pero sin desmedro de otros. Eso es difícil en situaciones normales, y mucho más cuando el éxito arrolla, tal como sucedió con “Queen” con Freddie Mercury a la cabeza. Eran un conjunto excelente y cada uno tenía sus fortalezas, pero también hambre de brillar por luz propia.

Tal como pasó con “The Beatles”, luego de cierto tiempo de permanencia sobre la cresta de la ola, es lógico que a los miembros del conjunto les empiecen a surgir ganas por investigar en estilos propios que los identifiquen más en sus individualidades. En “Queen” eso también sucedió y aquellos anhelos tuvieron la oportunidad de comenzar a brotar cuando la salud de Freddie Mercury comenzó a deteriorarse a niveles tales que era evidente para todos que las cosas no iban bien.

Por aquel entonces, Brian May era quien más se destacaba como compositor y también quien comenzó a ver que necesitaba una carrera para continuar con su arte cuando el oriundo de Tanzania ya no los acompañara. En aquel contexto fue que le surgió la posibilidad de componer una canción para un comercial de la firma Ford, lo hizo y el resultado era espectacular, pero sentía que debía compartir el prototipo con quien de alguna manera había sido su mentor y también el director creativo y artístico de la banda. Lo hizo y la respuesta fue alucinante.

Freddie Mercury notó que su colega estaba en el medio de una encrucijada profesional sin precedentes. Sabía que se hacía evidente el final de “Queen” por su enfermedad y también notaba que Brian necesitaba comenzar a explorar nuevos horizontes profesionales, pero hacerlo en solitario le provocaba la angustia propia de alguien que siente que está traicionando a sus amigos. Y es que, por aquel entonces, los límites no estaban del todo claros y cada uno de ellos trabajaba en ideas particulares y también para la banda, porque si bien el final era inevitable, nadie se animaba a enfrentarlo. Freddie fue honesto y demostró tener una visión de futuro espectacular.

“No quieres sacar este tema porque te parece desagradable, porque sientes que me estás abandonando o algo así. No te preocupes por eso, estoy bien. Deberías comenzar tu carrera en solitario, porque probablemente lo necesites”, le dijo Freddie Mercury a Brian May y esas palabras fueron como una bocanada de aire fresco en el medio de aquel momento crucial para todos. El líder del grupo sabía que su permanencia tenía fecha de caducidad a corto plazo, pero no podía arrastrarlos a todos al ocaso. “Me dio su bendición, mi ticket para salir y ser un artista en solitario”, decía el astrofísico británico en una oportunidad en la que rememoró aquel momento. Y así fue, Farrokh Bulsara lo liberó de las presiones y le abrió las puertas para que entrara a un nuevo mundo con su propia impronta.