Salen a la luz los caprichos de los coaches de “La Voz”, gracias a la intervención de Alejandro Sanz

Todas las compañías de televisión ya han comenzado a renovar sus contenidos, pues septiembre, indiscutiblemente, es la época de los reemplazos. “Antena 3” está haciendo lo propio y ha decidido deleitar a su fiel comunidad de televidentes con un material que funciona sí o sí: “La Voz”. Esta vez, Alejandro Sanz será uno de los profesionales a cargo de armar su equipo de talentosos, pero los colegas que lo acompañan no se quedan atrás en fama ni en brillantez, de hecho, todo lo contrario.

La nueva etapa de “La Voz” comenzará en apenas algunas semanas y Alejandro Sanz estará rodeado nada más y nada menos que de Malú, Luis Fonsi y Pablo Alborán. Todos los anteriores son artistas que cuentan con legiones de fanáticos, de modo que se espera que el segmento sea todo un éxito, no solo por sus innegables habilidades musicales, sino porque se percibe que entre ellos hay una energía estupenda, de pura diversión. Para promocionar el concurso, Pablo Motos ha recibido a todos en “El Hormiguero”, y allí han dejado anécdotas espectaculares.

El intérprete de “Corazón Partío” y sus compañeros se han encargado de que el aire de “Antena 3” perciba lo que podremos ver en algunos días con todos ellos en acción, pero también han protagonizado un momento súper divertido, cuando cada uno de ellos se animó a revelar en qué habían gastado sus primeros sueldos, en aquellas épocas en las que recién empezaban a degustar lo que significaba ser un profesional de la música. Pablo Alborán fue quien comenzó con su historia y él manifestó que el primer ingreso lo usó para comprarse una guitarra y para regalarle un traje a su madre, pues “le hacía mucha ilusión”.

Alejandro Sanz fue quien continuó con el relato y su anécdota se asemeja bastante a la de Pablo, porque su intención también tuvo que ver con agasajar a alguien que no era él mismo. “Le compré un coche a mi padre, él quería un Mercedes. Llegué a casa y le dije ‘sal un momento al balcón’, y le pregunté ‘¿ves ese Mercedes de ahí?’. Y dijo, ‘¡qué bonito!’, y le dije, ‘toma la llave’”, relataba el madrileño e inmediatamente desataba el caluroso aplauso del público. Posteriormente le tocó el turno a Malú, quien reconoció que su primera paga no había sido tan cuantiosa como para comprar un auto, pero sí para comprarse su primer móvil.

Sobre el final le llegó el turno a Luis Fonsi, otro artista que siempre se caracteriza por ser muy sencillo y austero. Lo suyo fue ponerse al día con algunas deudas, según él mismo contaba: “La plata a mucha gente que me había prestado. Amigos y familiares que me prestaron para que me comprara mi primera guitarra, un traje bonito. Me quedé en paz con todo el mundo”, declaraba con emoción. Sin lugar a dudas, todas han sido historias muy tiernas y no solo han servido para el entretenimiento, sino para que los fanáticos de cada uno fuesen testigos de que ninguno se ha olvidado de sus orígenes.

La pasión por la música es algo que Alejandro Sanz tiene en común con Luis Fonsi, Pablo Alborán y Malú; ese es el elemento que ha facilitado la unión entre sí y lo que nos permite percibir un espectacular clima de complicidad que va más allá del juego televisivo. Es evidente que todos han logrado construir vínculos de amistad entre sí y es por eso que hay tantas expectativas por lo nuevo de “La Voz”. Afortunadamente para los espectadores, ya no queda mucho tiempo para contener las ganas de verlos a todos en la pantalla chica.