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Miguel Bosé se prepara para lo que sucederá con "la Casa Azul" que heredó de Lucía, su madre
La progenitora del cantante falleció hace año y medio por coronavirus.
El 2020 fue un año para el olvido. La llegada del coronavirus puso en vilo a todo el mundo, generando caos en distintos aspectos de la vida, pero, sobre todo, en la vida misma, ya que varias personas fueron las que fallecieron a causa de este virus, y Lucía Bosé, la madre de Miguel Bosé, no fue la excepción.
El 23 de marzo del año pasado Miguel Bosé recibió la peor noticia. Su progenitora, Lucía Bosé, dejó este mundo por complicaciones a causa del COVID-19, que le produjo una neumonía de la que no pudo salir a sus 89 años.
Lucía Bosé pasó los últimos años de su vida en la casa que la vio dar su último suspiro. Fue en la famosa "Casa Azul", en Brieva, Segovia, en donde la madre de Miguel Bosé vivió desde que se retiró de la vida pública y decidió descansar en esta gran propiedad que tiene todo lo que necesitó.
Esta casa tiene 430 metros cuadrados y es ideal para quienes quieren vivir rodeados por la naturaleza. La vivienda cuenta con un salón con nada más y nada menos que un fresco (pintura) del artista compatriota de la progenitora de Miguel Bosé, Emilio Farina, con acceso directo al patio cubierto, con una chimenea que da a una fuente de agua que relaja con su sonido.
El color azul se debe a que era el favorito de Lucía Bosé, y es por eso mismo que es reconocida bajo el nombre de "La Casa Azul", que cuenta con tres plantas, 6 dormitorios, 4 baños y una cocina a la que no le hace falta nada. A esto se le suma la gran terraza de 35 metros por delante. Sin dudas, el intérprete de 65 años podría vivir allí tranquilamente.
Sin embargo, entre los parientes decidieron venderla. En un principio, su precio, publicado en un portal de compra/venta, era de 495.000 euros, una cifra bastante elevada a la que no cualquiera puede acceder, por lo que los familiares de Miguel Bosé decidieron rebajar el precio.
Es por esto que "La casa azul" pasó a estar a la venta por 430.000 euros, pero no había ningún comprador, aunque volvieron a subir el precio a 459.000 euros. Fue la sobrina de Miguel Bosé, Alma Sofía Villalta, quien decidió este precio final. Es ella quien, con apenas 24 años, negocia con los posibles inquilinos y se hace cargo de todo este asunto.
Desde SEMANA notaron que el anuncio inmobiliario que vendía la casa de la madre de Miguel Bosé desapareció del portal, quienes indican que el propietario fue quien dio de baja en agosto. El portal mencionado anteriormente contactó a Paola Dominguín para despejar las dudas, ya que no quedó ningún rastro de la venta de la residencia.
La hermana de Miguel Bosé no ha querido hablar mucho al respecto, pero confirmó que la casa todavía no se vendió, por más que los anuncios y publicidades hayan desaparecido, pero no dio más detalles sobre lo sucedido. ¿Habrá sido un inconveniente con la inmobiliaria? ¿La habrán alquilado? Por el momento, solo preguntas sin respuestas.
