La receta más fácil de guiso lentejas con la que pasarás el frío del invierno

Casi no hay manera de que un guiso de lentejas no quede estupendamente bien. Aunque a veces se mira con desprecio a esta menestra, es, sin embargo, uno de los platos estrella que además aporta una cantidad increíble de vitaminas y minerales.

Por si fuera poco, un plato de guiso de lentejas es para el invierno lo que una fresca ensalada de hojas verdes para el verano. Un plato imprescindible para tomar calorcito y recordar los viejos fogones de las abuelas.

Así que, si eres de los que no miras a menos a esta especie del Cercano Oriente, te traemos unos trucos para que en casa quieran repetir en más de una ocasión el guiso perfecto de lentejas.

Ingredientes para el guiso de lentejas (3 comensales)

1 taza de lentejas, preferiblemente de las que se hacen rápido

3 cebollas de verdeo

2 zanahorias chicas

1 churrasco de roast beef (o alguna carne blanda y con poca grasa)

6 tomates secos

1/2 cdita. de ají molido o paprika

Sal, aceite, pimienta.

Elaboración del guiso de lentejas

Primero: en una olla que esté previamente calentada, introduce la carne cortada en trozos con un poco aceite. Cuando la carne esté doradita por todas caras, retírala de la olla (pero no la laves). Segundo: corta la cebolla de verdeo y rehógala durante aproximadamente dos o tres minutos. En la misma olla donde hiciste la carne, agrega una zanahoria cortada en dados pequeños y saltea un par de minutos más.

Tercero: una vez que la cebolla haya tomado color, reintroduce la carne a la olla y agrega las lentejas y los tomates secos cortados a la mitad. Cuarto: en este momento, cubre todo con agua y condimenta con sal, pimienta y ají molido. Quinto: deja hervir el guiso de lentejas tapado para que el caldo no se evapore y, de vez en cuando, revuelve. Si ves que se está quedando con poca agua, puedes irle agregando un poco, pero antes caliéntala. El guiso estará listo entre ½ hora y 45 minutos.

Trucos infalibles para un guiso de lentejas de infarto

Si quieres acelerar el proceso de cocción de las lentejas, puedes dejarlas en remojo desde la noche anterior. Si vas a agregarle agua al guiso porque durante la cocción se está quedando seco, el truco es ponerle agua caliente porque la fría hará que las lentejas pierdan la piel. Aunque siempre estamos apurados, la recomendación para un guiso de lentejas para chuparse los dedos es hacerlo a fuego lento, tardarán un poquito más, pero el sabor te lo recompensará. Luego de que el guiso rompa el hervor, es probable que veas cómo se hace una espuma sobre el agua, la recomendación es quitarla con un cucharón. Y por último, aunque hay remover el guiso de vez en cuando, cuanto menos lo hagas es mejor, así evitas romper las lentejas durante su cocción.