La desconocida historia que une a Joaquín Sabina y Leiva desde antes de coincidir en la música

Las amistades que hizo Joaquín Sabina en los últimos años le han dado un aporte realmente valioso a su vida. En su etapa de mayor descontrol de los 90 habría necesitado mucho de ellos, especialmente de la persona que más lo ayudó a salir de las adicciones y su fatal ictus. También de su fiel amigo Leiva, un artista que ha imitado casi a la perfección esta etapa de madurez del trovador, marcada por la discreción y un amor irrenunciable que los hace cada día más parecidos.

Podría tratarse de la historia del Atlético Madrid que los unió para siempre en “Partido a partido”, o la mismísima música que han creado juntos. Pero Joaquín Sabina y Leiva están indudablemente conectados por el enamoramiento de Jimena Coronado y Macarena García. Son las “dos musas” que cambiaron el ritmo de sus vidas. Unos en Madrid y los más jóvenes en una casa de Alameda de Osuna, viven sus romances bajo un estricto secreto. Existe una gran amistad entre todos ellos que llevó, en medio de una crisis de pareja del exintegrante de “Pereza”, a que el trovador hiciera lo posible para que se reconcilien. Incluso, les escribió unas coplas para que se fortalecieran más.

El ejemplo de Joaquín Sabina que Leiva intentará seguir

La historia de admiración y sociedad artística entre los dos cantautores no debe limitarse a la música. Leiva ha pasado toda su infancia queriendo ser como el autor de “Peces de ciudad”, en lo musical y también probando suerte con muchas mujeres. Alba Molina y Michelle Jenner son sólo algunas de las que pasaron por su vida antes que Macarena García, según Libertad Digital. Sin embargo, la llegada de Joaquín Sabina a su vida marcó un antes y un después. Entendió finalmente que debía amar sin temor, como lo hizo el trovador con su amada “Jime”. El propio genio de Úbeda la ha descrito como alguien que “no se vende por 30 lucas”.

Joaquín Sabina se vio instantáneamente hipnotizado por el talento de la peruana al ver lo magnífica que era tomando fotografías. En su tierra natal la consideraban una de las mejores, de acuerdo a El País, aunque su verdadera magia era la personalidad. De carácter introvertido, creativo, leal y humilde, dejó atónito al trovador cuando quiso pagar una costosa cena por su cuenta. Fue una de las tantas señales para que al cantautor “le sobren los motivos” para amarla por siempre. Leiva encontró lo mismo en Macarena García, una actriz reconocida por sus múltiples comedias. Era la “compañera de camino” que necesitaba para terminar de verse en el espejo de su amigo.

De hecho, en los últimos días cumplieron siete años de amor incondicional. El cantante siempre se refirió a ella como un hombre enamorado, incluso cayendo en cursilerías que su amigo no habría aceptado en la etapa más joven de su vida. Pero Joaquín Sabina se rindió ante los pies de Jimena Coronado al escribirle “Rosa de Lima”, al igual que Leiva lo hizo con Macarena García en “Costa de Oaxaca”. Son definitivamente sus musas, de acuerdo a Libertad Digital, pese a lo que pudo haber costado ensamblarse como parejas. El autor de “Dieguitos y Mafaldas” recién se casó hace pocos años, en tanto su gran socio artístico sufrió verdaderas turbulencias en el camino. El oriundo de Úbeda estuvo al tanto de ello, dedicando hasta unas coplas para la reconciliación. “Abrid un Vega Sicilia por ellos”, sentenciaba en sus versos. Según Esquire, luego la actriz de “La llamada” le agradeció con una notas, que nadie descarta que formen parte de una canción del maestro.