La increíble fortuna que Lina Morgan mantuvo oculta hasta los últimos días de su vida

Lina Morgan ha sido dueña de un legado que pocas estrellas pudieron igualar. La maravillosa actriz disfrutó de una vida llena de lujos, elegancia y mucho dinero para cumplir todos sus sueños. Desde los inicios en el Teatro Apolo de Barcelona, la estrella no dejó de acumular millones de euros para construir su propio nombre. A fin de cuentas, el principal beneficiado habría sido Daniel Pontes por el famoso (y controversial) monto de 10 millones de euros.

El mayor capital que dejó Lina Morgan fue el teatro “La Latina” que compró en 1981 tras mucho esfuerzo y que vendió por 7,5 millones de euros. La operación se concretó en 2010, en los últimos años de vida de la empresaria, que pusieron su salud contra las cuerdas. Esta es la razón por la cual se deshizo de sus bienes y también de las joyas, trajes y otros vestuarios que fue adquiriendo. Pero el colgante que le obsequió su hermano lo mantuvo hasta sus últimos días. Era de un adorable elefante en plata lacada que le traía buena suerte cuando lo necesitaba.

La lista de tesoros de Lina Morgan

La actriz creció en una familia humilde, donde claramente no abundaban las joyas ni propiedades que ella rápidamente adquirió por su audacia. El teatro “La Latina” fue una clara prueba de su habilidad para los negocios. Reunió los ahorros suficientes junto al hermanopara realizar una oferta imposible de rehusar. “RTVE” añade que Lina Morgan se propuso “salvar el teatro” de cualquier forma y efectivamente lo logró. El día de su final fue despedida mágicamente en este lugar ante 3.000 personas.

El aporte de la actriz fue valorado por las grandes figuras del espectáculo. Según “El Mundo”, Concha Márquez Piquer fue una de las que más lamentó el suceso de su fallecimiento, así como también Juan Carlos Pérez de la Fuente hizo un homenaje inolvidable en su honor. Precisamente el histórico director del Teatro Español supo mejor que nadie que la madrileña hizo felices a millones. José Sacristán coincidió en este aspecto, equiparando las hazañas que logró como empresaria y humorista. Lina Morgan ocupó un espacio humorístico entre el franquismo y la Transición que generaba temor entre los artistas.

Nunca entendimos que vendiese el teatro

En el especial de “Lazos de sangre” se recordó la venta de su mayor obra artística como una especie de mancha en su trayectoria. Lo hizo únicamente para pagar las cuentas del tratamiento de su enfermedad, aunque es certero señalar que podría haber vendido otros tesoros antes que ello. Lisa Morgan no resignaba ni un euro por estar bien vestida, con clase y elegantes alhajas que la hicieran destacar, de acuerdo a “RTVE”. La razón es sencilla: pasó tantas necesidades que era el lujo que se permitía diariamente. Además, tenían un valor afectivo inconmensurable. El colgante de su hermano no se lo quitaba ni siquiera para dormir. “Vanitatis” precisa que fue la gran pérdida de su vida, hecho que quedaba en evidencia cada vez que lo recordaba con emoción, mirando el elefante de plata que le obsequió.