Desde que se anunció el fallecimiento de la Reina Isabel los ojos de mundo se posaron sobre Carlos III y es que a partir de entonces todo tendría otro rumbo para el Reino Unido, y esto quedó reflejado en los primeros pasos que dio el nuevo Rey de Inglaterra.

Si hay algo que no se puede negar es que el padre del Príncipe Guillermo tiene muy en claro que es lo que no quiere en su reinado es por ello que ante cada decisión que se le plantea busca desmarcarse de lo que fue el legado de su madre.

La coronación de la Reina Isabel fue emitida para todo el mundo, siguiendo cada uno de los detalles que había impuesto su padre para este proceso tan importante del que por primera vez todos podían ser testigos. En esta oportunidad la coronación del Rey del Reino Unido sufrirá algunas modificaciones.

Carlos III impone sus ideas

Según los trascendidos el exesposo de Lady Di tiene en mente afrontar una coronación en donde se mantendrá la majestuosidad y tradición de una ceremonia de tal calibre, pero buscando dar un mensaje de modernidad y simpleza a la hora de este tipo de eventos. La coronación de la Reina Isabel tuvo una duración de aproximadamente 3 horas, en el caso de su hijo se tiene previsto que no supere los 60 minutos.

Por otro lado, se tiene estipulado que en la coronación de Carlos III el número de invitados sea de no más de 2.000 y se tiene previsto plantear un código de vestimenta más relajado, con trajes de salón en lugar de túnicas ceremoniales como las que se usaron en la coronación de Elizabeth Alexandra Mary.

Carlos III, los gestos que podría cambiar la mirada del mundo

Según los trascendidos, Carlos III decidió eliminar la tradicional presentación de lingotes de oro al monarca y también la extensa procesión, debido a la situación económica actual de Reino Unido, sin lugar a dudas, un gesto que sorprende a muchos.