Arturo Pérez Reverte le confesó a Pablo Motos que robó un banco

Millones han leído sus libros. El polémico escritor Arturo Pérez Reverte hizo una pausa y "le tocó" pasar por El Hormiguero. Después de un año de su última visita al programa, aprovechó la oportunidad para presentar su nuevo libro Revolución y dejó algunas lecciones en el aire. Por las redes muchos han catalogado la entrevista como un “máster de vida”. Alaban su oratoria, su capacidad de análisis y que además se quedaron fijos viendo la pantalla por hora y media hasta que terminó.

El famoso escritor contestó cada una de las preguntas de Pablo Motos y le dedicó una buena parte de la conversación a los jóvenes y un tópico que se mantiene activo, la guerra. También habló de su novela. Una historia en la que un ingeniero de minas español vive en primera persona la revolución mexicana.

Este hombre de letras arrancó la entrevista con una peculiar anécdota. Confesó que es sí, que es cierto que robó un banco cuando tenía 25 años. “Ocurrió el 4 de abril del 77 en Eritrea. Entramos ahí y sacamos el dinero” durante la guerra. Mientras veía las fotos de su propio álbum comentó: “La guerra huele a plástico quemado y a carne que se pudre”, dijo.

Pablo Motos quiso averiguar cuál era su percepción en los actuales momentos bélicos y cómo afecta a los jóvenes. “El mundo es un lugar peligroso”, soltó como antesala a su memorable discurso. Él ha vivido situaciones al límite en Sudán, Nicaragua, ha visto infiernos y señaló que hay que juzgar desde las ideas y no desde las experiencias.

Sobre los jóvenes, Arturo Pérez Reverte indicó: “Estamos educando críos indefensos, ya que están en inferioridad de condiciones que los de otros países”. Para él es clarísimo que las nuevas generaciones no están preparadas para “el iceberg del Titanic. Los hemos criado híper protegidos pensando que el mundo se soluciona tocando la pantalla táctil del móvil o enchufando un teléfono a un enchufe".

Otra de las frases brillantes y dejó una reflexión en Pablo Motos, fue: "Les hemos quitado los mecanismos defensivos. La violencia es mala menos cuando tienes que defenderte, que entonces es buena. Cuando vienen otros que sí ejercen la violencia, para quien es natural, para quien el dolor, la soledad, el fracaso o la muerte son diarias, cotidianas, estamos en inferioridad de condiciones, y nos van a ganar. Estamos criando chicos demasiado confortablemente instalados en un mundo irreal”, dijo.

Sobre las mujeres

Arturo Pérez Reverte ha aprendido mucho sobre los silencios de las mujeres y su manera de mirar. “Una mujer callada puede enseñarte más que diez hombres hablando”, señaló el escritor.