El cambio que ha tenido Juan Urdangarin, de niño víctima a fiestero con Froilán y juez de Urdangarin

Siendo Juan Urdangarin el hijo más sensible y vulnerable de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, se podría pensar que por su inclinación a evitar cualquier situación que le haga convertirse en el blanco de la atención mediática. Se inclinaría a celebrar su cumpleaños 23 en la más estricta privacidad y tan solo rodeado por su familia y algunos amigos en Madrid. Sin embargo, todo parece apuntar a que el joven esta vez ha decidido hacer todo lo contrario y así lo reporta el medio Monarquía Confidencial.

Esta particular decisión podría estar motivada por el hecho de haber permanecido separado del clan familiar durante poco menos de un año, mientras estuvo de trabajo voluntario en La India, y esta vez ha querido hacer las cosas distintas, a modo de reencontrarse con su familia, y especialmente con sus primos Marichalar, Victoria Federica y Froilán, con quién por cierto tiene una excelente relación, ya que ambos son contemporáneos en edad.

De hecho, se puede afirmar que Juan Urdangarin tiene una relación de lo más cercana con la Infanta Elena y sus hijos, pues viven en la misma ciudad, así que son muy cercanos. De hecho, se confirmó en días pasados que el hijo de los exduques de Palma fue uno de los familiares que visitó a Victoria Federica durante sus días de reposo por peritonitis y se le ha visto junto a Froilán pasar algún rato libre juntos por las calles de la ciudad madrileña.  

Este nuevo ánimo renovado por parte de Juan Urdangarin podría ser el indicador de algunos cambios positivos que ha venido experimentando, en los que apuesta por una vida más tranquila y sin dejar que la atención de la prensa y los varapalos familiares sean un motivo para esconderse o intentar evadir lo que sucede a su alrededor. Sin embargo, hay afirmaciones que señalan que no por ello Juan Urdangarin avalan y aprueba el comportamiento de su padre con respecto a su nueva relación con Ainhoa Armentia, y de todos sus hijos y el entorno del exatleta, el primogénito ha sido el único en reprochar el comportamiento de su padre y cómo ha llevado su relación con su nueva pareja.

Pero, tras su último encuentro en Barcelona, se ha podido constatar que las diferencias entre Juan Urdangarin con el tío de Froilán han pasado a segundo plano y el amor paterno filial ha prevalecido entre ellos. Se trata de un bonito cambio que el joven parece afrontar con mucha madurez emocional y responsabilidad, en el que poco a poco deja de verse a sí mismo como víctima de penosas circunstancias para convertirse en un joven adulto consciente y en cuyas manos está el vencer al pasado y encargarse de sus acciones y su futuro. ¡Enhorabuena!