Estos son días de puro festejo para Raphael. Acaba de lanza un nuevo disco denominado “Victoria” en el que demuestra que sabe adaptarse a las nuevas demandas como nadie de su generación. No para de sumar récords artísticos y no tiene intenciones de retirarse, sencillamente porque está convencido de que sigue cantando muy dignamente. Pero hay otra cosa que tampoco está dispuesto a hacer: callarse cuando un tema lo interpela, un aspecto que quizás es lo que más enamora a Natalia Figueroa.

La moderación podría ser un adjetivo muy aplicable al ruiseñor de Linares. “Paso” es una respuesta que se escucha salir de su boca en cuanto es consultado por algo que no le interesa o de lo que no tiene información. A menudo usa esa frase cuando algún reportero quiere inmiscuirse demasiado en su vida personal, pero esta vez no era él quien estaba bajo análisis, sino un reconocido colega suyo.

En diálogo con el portal La Razón, el intérprete de “Mi Gran Noche” les recordó a todos que escogió a Pablo López para la composición de su nuevo disco por su calidad musical y porque lo entiende como nadie. Pero luego también se mojó en la polémica de Plácido Domingo con una rotundidad apabullante y, sin defenderlo, sí se empeñó en separar al artista de su vida privada.

Raphael puso los puntos sobre las íes como hacía mucho tiempo no hacía

Luego de un largo diálogo con el citado medio en el que se trataron varios tópicos, Raphael sentenció que no está de acuerdo con lo que le sucedió a Plácido Domingo, pero enfatizó en la idea de que él no puede condenar a nadie por sucesos que no vio. Recordemos que el director de orquesta fue señalado en el Me Too, el caso en el que más de veinte mujeres se animaron a acusar a artistas como los responsables de haberlas vulnerado, hecho que le costó varios conciertos.

No vayamos a juzgar moralmente a nadie. ¿Quiénes somos nosotros para hacerlo?

El padre de Manuel Martos es consciente de que, muchas veces, el ensañamiento mediático termina dando por ciertas algunas informaciones que nunca serán totalmente contrastadas y con eso dio a entender que confía en la inocencia de su colega. Más de una vez él mismo fue juzgado producto de algunas conclusiones apresuradas y quizás hoy piensa como piensa producto de haber sido víctima en más de una oportunidad, algo que Natalia Figueroa conoce de primera mano.

Mucho más que un cantante

Raphael es un auténtico intérprete de canciones. El mundo entero lo reconoce por su enorme capacidad de convertir las historias de sus coplas en verdaderas películas cargadas de significados.