Nacho Palau inicia la cuenta regresiva de su tratamiento escudado en Miguel Bosé

Nacho Palau no puede hablar, y eso no es por que él no quiera. Se trata de un efecto inmediato de la última fase del tratamiento que lo mantiene alejado de lo que pudo ser su gran comienzo en la televisión, gracias a su participación en el reality de Telecinco. La vida nuevamente lo desafía, con obstáculos en su camino que también lo hicieron reencontrarse con Miguel Bosé, el hombre con quien compartió gran parte de su vida. 

El destino a veces puede convertirse en una trampa de nuestros deseos más inconscientes. Cuando el escultor soñaba con transformar su vida por completo a través de un proyecto que le asegurara la estabilidad económica que tanto le ha faltado en la vida, el cáncer llamó a la puerta para cambiarle los planes y hacerle tomar una pausa forzada después de tanto conflicto acumulado con Miguel Bosé, por ejemplo, con quien hasta hace meses atrás la relación era un verdadero camino de espinas. 

Desde que Nacho Palau fue diagnosticado con cáncer de pulmón, el tiempo de brillar en las pantallas se terminó. Su actividad en redes sociales mermó, y la pasión que antes compartía con su nuevo amor, Cristián Villela, también tuvo que frenar para priorizar por entero su salud, si es que en verdad quería llegar a esa imagen del futuro soñado junto a sus hijos.  

El portal "Informalia" ha difundido que la cuenta regresiva de su tratamiento comenzó y que la primera reacción física de Nacho fue la imposibilidad de hablar. El escultor no puede verbalizar ni construir oraciones, y su cuerpo está absorbido por los medicamentos que empiezan a impactar positivamente. Al parecer, el tumor se ha reducido y, de ser así, pronto reaparecerá para compartir esta dramática experiencia que ha dejado un gesto positivo que al escultor le alegró el corazón. 

Cuando estaba en sus peor momento de incertidumbre, Miguel Bosé tomó partido. A través de un llamado, le hizo saber a su ex pareja que él acompañaría en todo lo que necesitara. De hecho, se adelantó al peor escenario y se comprometió a cuidar de Yvo y Telmo si pasaba lo peor, disolviendo el miedo mayor de Nacho Palau, ese que le roba la serenidad al imaginar que sus pequeños puedan tener alguna carencia en su vida, como él las vivió en carne propia. 

En el mismo medio se explica que, antes de que el ex de Bosé pasara por "Supervivientes", trabajaba en una fábrica de embutidos de Chelva y ganaba apenas 1000 euros al mes, un dinero que difícilmente podía solventar su vida y la de sus dos hijos. Que el intérprete de "Morena mía" le hiciera tal promesa es un gesto que Nacho Palau jamás olvidará, menos ahora que su vida está por cambiar para siempre. 

El corazón de un bandido

Miguel Bosé y Nacho Palau estuvieron juntos por más de dos décadas. Fue en esa relación que la pareja decidió tener hijos. Los pequeños crecieron con el amor de ambos hasta que la ruptura separó sus destinos y puso en jaque esa hermandad que habían construido. Luego de esta recaída de Nacho y del gesto de Bosé puede que ese sentimiento vuelva a resurgir.