Mario Vaquerizo, la razón de peso que lo llevaría a "separarse" de Alaska

Durante un mes, Mario Vaquerizo y Alaska tomarán distancia. Un asunto laboral es el único motivo que puede poner tierra de por medio entre ellos. El artista se enfrentará a uno de sus mayores retos. Interpretará a Juanita, una mujer que quiere ser monja, en la película La reina del convento.

Al creador de las Nancys rubias le encanta esa historia, porque no se representará a sí mismo, a lo que sabe que será un gran desafío para él, aunque esto implique permanecer un tiempito separado de su gran amor: "Bueno iré y vendré porque hay algunas actuaciones pendientes pero también es bueno que en una pareja de vez en cuando corra el aire"

Es bueno que en una pareja de vez en cuando corra el aire.

El esposo de Alaska también confesó que se siente muy a gusto rodeado de mujeres. Su madre, su tía, su hermana y su mujer le han brindado la confianza para desarrollarse y ser una persona auténtica.

Mario Vaquerizo también señaló que tendrá que quitarse la patilla que tanto le gusta a Alaska. Y no solo eso también tendrá que depilarse las manos para encarnar el papel y convertirse en una señora de verdad. "Me dicen que como tengo buen pelo que esté tranquilo porque en cuestión de un mes ya las tendré de nuevo".

A pesar del distanciamiento al que se verá sometido el matrimonio, porque hay más planes para Telepasión junto a Ana Obregón y un concurso nuevo de televisión, el artista le dijo a Alaska que a partir del 22 de diciembre suelte toda actividad, porque se desconectarán juntos por un buen tiempo. Harán lo que menos le gusta a ella, improvisar. "Le encanta planificar todo en su agenda y ya le he avisado que se olvide de esa manía y que nos lancemos a lo que surja. Como sé que me quiere estoy convencido que accederá a mis deseos".

Católico

Mario Vaquerizo cada vez que puede va a misa. Le otorga mucha tranquilidad y paz. "Me hace sentirme muy bien comulgar y rezar todas las noches antes de dormir", señaló.