CHÁBELI IGLESIAS

Chábeli toma lo mejor que le dejó Mario Vargas Llosa a pesar de Isabel Preysler

La diseñadora sabe tomar lo mejor de las personas que la rodean.
sábado, 19 de marzo de 2022 · 19:59

La actividad de Chábeli Iglesias en redes sociales nos tiene perplejos. Casi parece mentira que estuviese tanto tiempo ausente del espacio digital, por lo a gusto que se la ve en ese ámbito. Afortunadamente, un día se dio cuenta de que estaba desaprovechando una gran oportunidad para estar en contacto con la gente que la quiere y decidió aparecer para nunca más partir. Su perfil oficial de Instagram funciona como un catálogo de su línea de productos textiles, pero también para que veamos cuánto coincide con Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa.

Sabemos que Chábeli Iglesias no ha contado con la dicha de ver cómo sus padres se amaron, todo lo contrario. La relación entre Julio Iglesias e Isabel Presysler fue bastante tormentosa por múltiples factores, pero ahora la empresaria tiene la satisfacción de saber que su madre está pletórica de felicidad y amor con Mario Vargas Llosa. Lo de ellos es un amor tardío, maduro pero intenso y consistente; quizás porque ambos saben muy bien lo que ya no están dispuestos a tolerar.

Chábeli Iglesias disfrutando de su biblioteca personal.

Fiel a su estilo, hace algunas horas Chábeli Iglesias colgó una foto en la que muestra que le ha robado a Mario Vargas Llosa una de sus grandes pasiones: la literatura. En adjunto puede apreciarse la imagen a la que hacemos referencia, una postal nada casual y que fue tomada seguramente en la casa que la hermana de Tamara Falcó tiene en Miami. Esto nos lleva a otro rincón que los seguidores de la vida de Isabel Preysler tenemos muy presente, estamos haciendo referencia a Villa Meona, la residencia de la socialité.

Sí, es cierto, el mote que tiene esa casa no se corresponde con el glamour que emana su propietaria, pero no es casualidad que se lo adjudicaran. Y es que la morada cuenta con tantos baños, que casi ya no pueden contarse y esa es la razón de la picardía. No obstante, además de los cuartos para el aseo personal, hay un espacio muy grande dedicado a cultivar eso que hace vibrar el alma de Mario Vargas Llosa y el de la reina de corazones: un cuarto especial dedicado a la lectura, en el que hay ejemplares de todos los géneros y de todos los años; muy similar al que se ve de fondo en la imagen de Chábeli Iglesias.

Tamara Falcó en la biblioteca de la casa de Isabel Preysler.

Isabel Preysler se reconoce a sí misma como otra ferviente defensora de las obras literarias, de modo que la pasión de Chábeli Iglesias en parte es heredada y otra aprendida, pero ya sabemos que no es de su padre biológico. El intérprete de “Me olvidé de vivir” seguramente le ha inculcado muchos valores a su primogénita, pero no lo imaginamos leyendo una obra clásica frente a Chábeli. Quizás pecamos de ignorantes, pero nos resuena más la idea de pensar en el gran Nobel de Literatura en esa tarea.

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