La sobrina más discreta que la familia de la Reina Letizia prefiere mantener anónima

Parece que fuera ayer cuando los medios reportaban la feliz noticia de que Telma Ortiz, hermana viva de la Reina Letizia, se convertía por segunda vez en madre de una niña, fruto de su relación con su pareja, el abogado irlandés Gavin Bonnar.

Sin embargo, nada más trasciende. Han pasado 6 meses desde aquel momento y es muy poco lo que se conoce sobre la niña. Ni su nombre, fecha exacta de nacimiento o apariencia han sido dados a conocer a conveniencia de la hermética confraterna de la Soberana. Sin embargo, la economista ha sido captada por algunos medios en un centro comercial junto a la más pequeña del clan Ortiz Rocasolano.

Esto ha sido en días recientes. Como cualquier otra transeúnte, Telma Ortiz llevaba a su hija en una bolsita marsupial y miraba vitrinas, con especial atención a una serie de juguetes con descuento. Su look, bastante juvenil con minivestido y botas, daba fe de su excelente recuperación después de los primeros meses desde su alumbramiento.

En todo momento, la relativa familiar de la Reina Letizia ha mostrado su faceta más dulce dedicando algunos cariños a la bebé, quien, a juzgar por las fotos aún pixeladas, estaba cubierta con un abrigo rosa y parece ser rubia. Un nuevo dato que permite siquiera acercarse a la apariencia de la nena, quien, por disposición familiar, se mantiene protegida de las pesquisas de la prensa todo cuanto sea posible. Se desconoce cuándo Telma se planteará la posibilidad de presentar a la niña en sociedad, más allá del círculo privado familiar o si lo hará alguna vez.

Por ahora, solo queda esperar y ser testigos, desde lo incógnito, de la felicidad que conlleva a los relativos de Telma Ortiz y la Reina Letizia la llegada de la más pequeña de la familia.