Luis del Olmo y un consejo que llegó temprano a los oídos de Belén Esteban

Belén Esteban es una de las tertulianas más aguerridas. No importa el tópico que se trate, si ella tiene una posición tomada al respecto, no dudará en hacerse escuchar y llegará hasta las últimas consecuencias. Se siente cómoda con los escándalos televisivos y no le teme a ningún adversario. Luis del Olmo, por su parte, también se dedicó a la comunicación de ideas y aunque a simple vista pareciera que solo tienen la fama como elemento común, en realidad hay mucho más.

Luis del Olmo ya está retirado, con lo cual no podríamos decir que es contemporáneo a Belén Esteban. Siempre se ha dedicado a la radio y es considerado como una de las grandes instituciones de la industria radiofónica de nuestro país. Solo encontramos diferencias al analizarlos, pero lamentablemente, para conocerlos en detalle hay que acceder a sus penas, a sus mayores fracasos y decepciones.

Luis del Olmo y Belén Esteban fueron estafados por sus respectivos representantes. Ambos confiaron ciegamente en las personas que manejaban sus carreras, pero el tiempo les demostró que no hicieron bien al entregarse tanto. Rogelio Rengel fue el verdugo de Luis y Toño Sanchís el de la de Paracuellos y otro elemento que tienen en común es que los dos lograron demostrar en la justicia que efectivamente habían sido víctimas de estafadores.

Quienes conocen a la madre de Andrea Janeiro y medianamente siguen su actividad televisiva saben que puso todo su empeño en hacer justicia y finalmente no solo lo consiguió, sino que también cobró lo que le correspondía como compensación. Pero Luis del Olmo no era tan fuerte y el solo hecho de saber que su mano derecha lo había traicionado lo hizo pedazos. Lo anterior es tan cierto que él mismo ha manifestado en varias oportunidades que la pena por la estafa fue uno de los tragos más amargos de su vida.

No obstante, hay un punto que separa a Belén Esteban de Luis del Olmo y que no pasa desapercibido en este análisis. Y es que él no llegó a ver ni un euro de lo que le correspondía como indemnización por los daños causados. Oportunamente, el periodista le recomendó a su colega que no se hiciera ilusiones y que cualquier paso que emprendiera en sede judicial lo hiciera sin ninguna intención de ser recompensada, pues al menos así se evitaría el dolor de la desilusión, como ya le había sucedido a él.

Seguramente, Belén Esteban escuchó el consejo de Luis del Olmo y hasta lo agradeció porque en aquel momento no era fácil encontrar personajes famosos que empatizaran con los dramas ajenos. Sin embargo, parece que algo distinto hubo en sus estrategias de defensa como para que la historia terminara tan diferente. "El abogado y él han recurrido, pasarán otro par de años, ya cumplirá ochenta y muchos años, dirán que es mayor y no irá a la sombra", decía con amargura y resignación Luis cuando le consultaron y ese debe ser el sentimiento que sigue en su corazón porque nada ha cambiado.