Los oscuros motivos que habrían llevado al fin de la relación entre Francisco Rivera y Kiko Rivera

Una de las consecuencias más visibles de la pelea entre Kiko Rivera e Isabel Pantoja fue el acercamiento del DJ a la familia Rivera, con quienes la tonadillera tiene una guerra abierta desde la muerte de Paquirri. A partir de entonces, Kiko se hizo muy cercano a su hermano Francisco Rivera, aunque aparentemente no pudieron hacer funcionar la relación y los rumores apuntan a que han vuelto a distanciarse. 

"La relación de Francisco Rivera y su hermano Kiko Rivera es prácticamente inexistente, podríamos estar hablando de una relación rota", decían hace unos días en el plató de "Socialité". La información comenzó a circular como un rumor, pero el paso del tiempo sólo afianza el conflicto y, si bien aún no está confirmado, habría dos motivos que los llevaron a pelearse. 

Por un lado, una versión asegura que el DJ no pudo dejar pasar las duras declaraciones de Francisco sobre Isabel Pantoja. Recordemos que el torero la llamó "mala persona" cuando la tonadillera debió regresar a los juzgados de Málaga y no tuvo miedo en manifestar que "se merece todo lo malo que le pase".

Estas palabras habrían sido una daga en el corazón de Kiko Rivera, quien se ha referido de forma peor hacia Isabel y hasta la ha llamado “mala madre” públicamente, pero no puede evitar sentir compasión por el duro momento económico y emocional que está atravesando. El DJ no quiere que nadie de su entorno se meta con su madre ahora mismo, y las declaraciones de Francisco habían deteriorado la relación. 

Por otro lado, fuentes cercanas al torero confirman que Francisco Rivera ha descubierto que Kiko Rivera filtra información de él a cambio de dinero. Esta hipótesis significa una fuerte acusación que determinaría el motivo por el cual el hijo de Carmen Ordóñez rompió su relación con el DJ y no quiere volver a verlo.

Hasta el momento, ninguno de los implicados ha querido dar declaraciones al respecto, y tanto Kiko como Francisco Rivera dejan que el hermetismo y la confusión se apodere de la situación. Pero, por más que guarden silencio, el distanciamiento entre ambos es obvio y el silencio hace más ruido que cualquier palabra.