Enrique del Pozo se distancia de Miguel Bosé con una filosa comparación

“Supervivientes” ha comenzado y aunque todavía es muy pronto para cantar victoria, todo parece indicar que con este segmento Telecinco tendrá éxito. Los concursantes ya están en Honduras y eso ha derivado a que sus principales defensores en España tomen relevancia de cara a los medios. Ese es el caso de Enrique del Pozo, quien tiene a Rubén (su pareja) intentando salir airoso de la experiencia. Nacho Palau también es parte del proyecto, pero ya sabemos que Miguel Bosé no será quien lo proteja de las críticas.

Enrique del Pozo es un hombre de los medios. Lleva años desempeñándose como tertuliano, de modo que sabe perfectamente qué hacer en función de sus objetivos de exposición. Ahora mismo, tiene claro que Rubén lo necesita, teniendo en cuenta que viene del mundo deportivo y que su experiencia en la tertulia es nula. No obstante, no imaginábamos que Miguel Bosé sería la herramienta que utilizaría el artista para beneficiar a su chico.

En diálogo con “ABC”, el madrileño se ha sincerado como nunca antes. Ha hablado de cuánto le duele la discriminación que ha sufrido su pareja, por ser disidente en un rubro profesional en el que priman las normas tradicionales. Gritó a los cuatro vientos que está súper enamorado y que espera que en breve los espectadores puedan dejar de verlo a él y Rubén como a fenómenos, para entender que se adoran y respetan mutuamente. Definitivamente, no fue eso lo más ácido de la entrevista.

Enrique del Pozo se desmarcó de Miguel Bosé, al asegurar que él no ha escondido a su pareja por miedo al qué dirán. “Llevamos un año juntos, nos queremos y lo hemos hecho público. Yo no he ocultado a mi novio durante 26 años, como ha hecho Miguel Bosé”, dijo el intérprete con la energía que lo caracteriza, en un claro intento por legitimar su vínculo. Pero las críticas contra el vocalista no quedaron ahí, sino que se extendieron a la controversial decisión del cantante de “Intérprete Bandido” de separar a Nacho de dos de sus hijos. “Me daría vergüenza tener una pareja a escondidas y separarla luego de los niños”, manifestó. Claramente, no hizo falta decir más nada para que todo el mundo comprenda que lo que menos desea es parecerse al nacido en Panamá.

Sin lugar a dudas, las palabras de Enrique del Pozo no tardarán en llegar a oídos de Miguel Bosé e imaginamos la poca gracia que le debe haber causado. Sin embargo, lo más probable es que no gaste ni una gota de su energía en responderle, porque no lo ha hecho antes ni lo hará ahora. Pero al tertuliano debe haberle quedado la satisfacción de haber defendido a su amor contra viento y marea. De ahora en más, sabemos muy bien qué esperar de su parte cada vez que alguien se anime a decir algo malo de Rubén.