La estrategia del Príncipe Guillermo y Kate Middleton para proteger a la Reina Isabel

Hace varias semanas que el estado de salud de la Reina Isabel genera preocupación, tanto en la Familia Real inglesa como en el pueblo que gobierna. Desde que la monarca faltó a la tradicional conmemoración del Día de la Commonwealth, las alarmas quedaron encendidas y el Príncipe Guillermo y Kate Middleton tomaron ciertas medidas a partir de esto.

Si bien la situación actual de la Reina Isabel está completamente blindada, su agenda laboral desvela lo débil que se encontraría en estos días. La monarca, quien cumplirá 96 años el próximo 21 de abril, realiza actividades que están siendo planificadas con mucho cuidado para no complicar su salud, pues estaría sufriendo fuertes problemas de movilidad. 

La ausencia de la reina en el Día de la Commonwealth se une al traslado definitivo al castillo de Windsor. De esta forma, Isabel abandona definitivamente el palacio de Buckingham para estar cerca de sus familiares y vivir con las comodidades que le ofrece esta histórica residencia real, ubicada en el condado de Berkshire, Reino Unido.

Frente a estos cambios, pensados exclusivamente para cuidar a la Reina, el Príncipe Guillermo y Kate Middleton estarían planeando mudarse a Windsor, una estrategia que les permitirá compartir más tiempo con la soberana, pues los últimos acontecimientos han hecho pensar a los duques sobre la necesidad de estar en familia.

Tanto Guillermo como Kate tienen su residencia en el Palacio de Kensington, en Londres. Según “Informalía”, la mudanza se daría este verano y los duques de Cambridge ya están analizando las diferentes opciones de castillos donde podrían iniciar una nueva etapa de sus vidas.  

Por el momento, dentro de las opciones que figuran en la lista del Príncipe Guillermo y Kate Middleton está Anmer Hall, la casa de campo de los duques; Frogmore House, la mansión de campo de los ex duques de Sussex o Fort Belvedere, la antigua residencia de Eduardo VIII. Mientras tanto, aseguran que los apartamentos que se encuentran dentro del recinto de Windsor habrían sido descartados por el matrimonio.