La Reina Letizia y el escándalo que supone presumir un poco más de lo permitido

A pesar de que en pleno siglo XXI las royals europeas distan muchísimo de sus históricas antecesoras, hay temas que permanecen inalterables y se resisten al paso del tiempo. La Reina Letizia es prueba de ello y, aunque casi siempre acierta en temas de estilo, lo cierto es que a algunos sectores les cuesta aceptar de su parte alguna propuesta que incluya "riesgo". Transparencias, faldas cortas, aberturas y escotes. Si siempre se habla de que es necesario que la Soberana se "humanice" aún más y sea menos reservada y estoica, ¿por qué hay resistencia hacia algunos cambios más visibles?

Esta pregunta viene a cuento justamente por el debate a partes iguales que generó el vestido color fucsia que dejó expuestos sus esculpidos abdominales. Modelos con mucha menos tela y más atrevidos se ven a diario, pero unos centímetros de abertura lateral han desatado las opiniones en redes sociales y espacios de opinión.

La colección que ha desatado opiniones encontradas

Pero esta no ha sido la única vez que la Monarca nos ha dejado sin palabras al lucir algunas de sus prendas más icónicas en las que, paradójicamente, no tuvo miedo de mostrar más piel que hace días. En años anteriores, especialmente en sus días como Princesa de Asturias, ¿cuántas veces no la vimos usar minivestidos en Palma de Mallorca?

Los escotes corazón, cuellos en "V", o de estilo "halter" con o sin finísimos tirantes han sido algunas de las apuestas más atrevidas de la Reina Letizia en importantes eventos tanto nacionales o internacionales. Incluso hubo un gran escándalo en el que casi fue tachada de vulgar, al acudir a una gala con un vestido azul marino de encajes con una falsa abertura frontal tipo escote. Lo que se descubrió es que esta creación había pertenecido antes a la intachable Reina Sofía, pero en la figura de la esposa del Rey Felipe fue un tema del que se habló tendidamente.

El lugar donde la Reina Letizia se siente más cómoda

Por supuesto, con el paso de los años, los atuendos con largo midi han invadido el vestidor de la Reina Letizia y llegaron para quedarse, las mangas largas incluso se hacen presentes en los climas cálidos y los cuellos redondos son sus grandes aliados.

Hay todo un universo de opciones a su disposición, pero ella parece haber encontrado su punto intermedio. Pero, ¿no sería un poco aburrido si siempre apostara a la misma fórmula con muy pocas variaciones? En la diversidad está el gusto y a fin de cuentas es ella quien entiende y cuida cada aspecto de su imagen y su decisión se basa en ello, no hay razón para juzgar, ¿o si?