Por qué todos los ojos se posan en Juan Urdangarin y la Infanta Cristina quiere que vuelva a casa

Si hubo alguien que tuvo las más dulces palabras para describir alguna vez a Juan Urdangarin, fue en el 2011 su padre, Iñaki Urdangarin. En aquella oportunidad expuso: "Es muy bueno, creo que es el que está más unido a nosotros. Es algo tímido, pero luego en casa es muy gracioso. Es de todos el que más se parece a la Infanta en carácter y a mí en el físico. Es noble y muy responsable". Hoy, la vida del jovencito es una completa incógnita, atravesada por el exilio, el encarcelamiento de su progenitor y ahora la separación de sus padres.

Los años han pasado y ahora tenemos a un joven veinteañero que sin duda tiene claro cuál es su camino. De lo dicho por su padre nada ha cambiado, pero sí sus intereses. Madrid sería apenas una base para su estadía, pero el resto del mundo es su hogar. Así lo hemos podido saber a través de las informaciones expuestas desde "El Programa de Ana Rosa", cuando finalmente se supo que Juan Urdangarin se encuentra en un voluntariado en La India, país que por cierto tiene relación especial con su abuela, la Reina Sofía y su tía abuela, la Princesa Irene.

Podríamos decir que fuera de los actos solidarios que protagonizan los reyes Felipe y Letizia, además de las actividades e intereses de la Emérita y su hermana; Juan Urdangarin sería el único de la nueva generación de Borbones que realmente se enfoca en este tipo de causas. Ni siquiera la Princesa Leonor con su nivel de representatividad o Victoria Federica con su gran alcance mediático, se han visto vinculadas a este tipo de gestiones solidarias de desprendimiento y vocación de ayuda hacia los más necesitados.

Así que Juan Urdangarin se encuentra trabajando de la mano de la ONG Entreculturas, la cual lleva adelante un gran proyecto educativo y cultural para algunas localidades del subcontinente asiático. No es la primera vez que lo hace, según nos amplia "El Español Portfolio", en 2021 ya había participado junto a este grupo sin fines de lucro en una campaña similar, como parte de sus prácticas profesionales para graduarse en sus estudios de relaciones Internacionales. "Juan es un chico profundamente religioso. Cree en un mundo mejor y trabaja para conseguirlo. No le gustan los focos, ni ser el centro de atención. Quiere ayudar, le encantan los niños y, si le dejan, se pasará la vida intentando mejorar sus vidas", así lo cuenta una excompañera de clases.

Juan Urdangarin es un verdadero trotamundos, de profundas convicciones religiosas y que desea mantener su vida en el anonimato. Meta que ha llevado con éxito, pues no se le conoce ningún interés sentimental ni tampoco tiene demasiados seguidores en su cuenta de Instagram. En casa, su madre, la Infanta Cristina, lo extraña enormemente según cuentan al mencionado rotativo, pero en su deseo no figura retenerlo junto a ella en Ginebra. Sabe que el niño de los ojos de la Reina Sofía ha heredado de su casta helénica el placer de ayudar a otros. Esto lo hace para muchos, el mejor de los chicos Urdangarin, aunque eso signifique que quizás decida hacer vida aparte sin casi aparecer en España.