La Reina Letizia y las peores acusaciones que han recaído en su contra a lo largo de los años

La Princesa Leonor y la Infanta Sofía destacan siempre en cada presentación pública y suponen un gran tema de interés ante la prensa nacional e internacional gracias a su belleza, saber estar y, sobre todo, su increíble formación académica. Detrás de ellas, una madre orgullosa de corazón inmenso y temple de hierro las observa. ¿Quién sino la Reina Letizia podría concederse a sí misma como la garante del brillante futuro que espera a Casa Real? Pero más allá de ello, cabe preguntarse cuál ha sido el nivel de sacrificio personal, a costa incluso de las más variadas críticas desde el ojo público.

Educar a la futura jefa de Estado no es cualquier cosa y, no desmerezcamos, a una Infanta de España (sobre todo en el ánimo de que no repita los errores de sus antecesoras) tampoco. Es por ello que para la Reina Letizia, la disciplina es sino la única, una de las principales piedras angulares de la educación de sus niñas. No sabemos si la Princesa Leonor sigue yendo a la cama a las 9 pm en Gales como hizo siempre en casa y escogerá con recelo cada cosa que come, pero definitivamente estos hábitos han contribuido a que ambas tengan una capacidad cognitiva bien desarrollada, y sean muy sanas.

Medios como "Merca2" han señalado, además, las restricciones que tanto la Princesa Leonor como la Infanta Sofía han tenido con respecto al uso de aparatos electrónicos como la televisión y los móviles, e incluso siempre se ha manejado que los contenidos que consumen fueron estrictamente monitorizados y, aunque hubo quien criticara la medida de la Monarca al considerar que pretendía "aislar" a sus hijas del mundo exterior, es un tema poco extendido y la verdad es que siempre tuvieron acceso a estos dispositivos, pero de forma que no rivalizaran con el tiempo de estudio, lo cual es sumamente diferente a restringirlos o prohibirlos.

Las vida de restricciones de Leonor y Sofía

¿Una vida sin golosinas y sin azúcar de ningún tipo? Parece difícil de creer, pero la verdad es que existen casos y sí se puede vivir sin este añadido que tanto gusto da. La Reina Letizia ha sido tan estricta con este punto que ni siquiera se ha salvado de sus restricciones la abuela de Leonor y Sofía, la Reina Sofía, y sus 'peligrosos' caramelos de anís. Hasta hoy la regla se mantiene al menos para la benjamina de los reyes, y con la esperanza de que la heredera siga el paso en Gales. En el menú no hay opción a procesados, bollería ni dulcería industrial.

Por supuesto, otras voces no se conforman y han arremetido contra la Reina Letizia por "no dejar" que la Princesa Leonor y la Infanta Sofía puedan tener una vida normal. Pero sí que la tienen, pues cercanos a la familia real aseguran que tanto el Rey Felipe como su esposa han procurado que sus hijas vivan una infancia y adolescencia como otras chicas de su edad, solo que esto no lo viven de cara al público. Aunque ser políglotas, entender sobre protocolo, diplomacia, historia y funciones sea el punto discordante, nada parece indicar en las jóvenes royals, que esto les ha causado algún problema.