Alba Santana, su vida en Ámsterdam después de un año sin su madre, Mila Ximénez

Un día como hoy, pero del año pasado, Alba Santana recibía el varapalo más duro de su vida. Mila Ximénez perdía aquella batalla que tan valientemente había librado contra el cáncer. Entonces, recibió el afecto de aquellos compañeros de la periodista y de millones de televidentes.

Con todo el dolor del mundo, Alba se encargó de dejar a punto todos los papeles, y de embalar aquellos recuerdos que tanto dolor le causaban, para emprender su retorno a Ámsterdam. En esta ciudad es donde años atrás armó su vida junto a su familia.

La hija de la comunicadora lleva más de 15 años asentada en los Países Bajos. Allí se encuentran también sus hijos y su marido, con quien lleva compartidos 14 años de vida en pareja. El empresario Aviv Miron la acompaña en su transcurrir diario eminentemente familiar.

Sin embargo, Alba Santana jamás pudo desprenderse de su tierra natal. Cada vez que hizo falta, la hija del tenista recorrió los casi dos mil kilómetros que separa la ciudad de las bicicletas de nuestro suelo.

Es que no quiere romper los lazos que la unen a su familia. Además, tal como se dice popularmente, al fin y al cabo, uno siempre vuelve a aquellos lugares donde fue feliz. La adoración de Mila Ximénez lo sabe y lo ejecuta tanto como puede.

De allí su gran pasión por Marbella. Atesora las remembranzas más bonitas de tiempos pasados. Fue en ese destino costero donde su madre se refugió para disfrutar su último verano junto a los suyos, una vez diagnosticada la enfermedad que le costaría la vida.

Por otro lado, Madrid significa para ella volver a coincidir con viejos amigos de su madre. Suele quedar de vez en cuando con aquellos más queridos y que más quisieron a Mila Ximénez. Uno de ellos es Raúl Prieto, a quien guarda un especial cariño.