El motivo que obliga a la Infanta Cristina a pasar el fin de semana con Iñaki Urdangarin

Después de la tormenta no solo llega la calma, sino los intentos de armonía forzada. Nadie, absolutamente nadie en el círculo familiar de la Infanta Cristina quiere ver a Iñaki Urdangarin ni pintado, pero ella se mantiene firme en su propósito de ceder al enfado, la frustración y un nuevo estado civil que nunca pidió, tan solo por el bien de los hijos que ambos comparten, y esta ocasión no es menos que meritoria, pues su hija menor, Irene Urdangarin, cumple 17 años este domingo, así que todo indica que los ex duques de Palma han coincidido nuevamente para celebrar a su benjamina, que a la vuelta de un año se convertirá en mayor de edad.

Esta posibilidad es perfectamente posible si tomamos en cuenta una de las más recientes publicaciones de la revista "Vanitatis", en la que quedaron rastreados los movimientos de la expareja esta semana por Barcelona. Ambos se encuentran en el barrio de Pedralbés y, según cuentan algunas fuentes al citado medio, a pocos metros de distancia, aunque aún no hay pruebas fotográficas que los delaten.

Mientras que la Infanta Cristina pernocta en un hotel de la zona, Iñaki Urdangarin se aloja desde el pasado miércoles en el piso de unos amigos que forma parte de un exclusivo conjunto de edificios con garaje cuyo acceso interno permite acceder a la piscina y los jardines directamente, por lo que resulta bastante privado, y puede ir y venir sin ser visto.

En cuanto a la Infanta Cristina, ella se hospeda en el el hotel AC Victoria Suites, donde en cada oportunidad en la que se queda allí (no es la primera vez que elige este lugar para quedarse en la Ciudad Condal) elige un pequeño apartamento con cocina incluida. Sin embargo, a la exduquesa siempre se la puede localizar durante las mañanas en el vestíbulo, pues suele tomar el desayuno en el bufé que ofrecen en las instalaciones.

En este sentido, todo apunta a que la familia está reunida en Barcelona, especialmente porque este lunes es festivo en Ginebra, pues al igual que en Cataluña celebran la segunda pascua. Los detalles de la celebración alrededor de Irene Urdangarin están celosamente guardados, no se sabe si dividirá su tiempo entre sus padres o todos se reunirán en un punto intermedio, pero alguna confirmación hay sobre la estadía de la niña y sus padres en esta localidad. “Lo normal es que Irene venga a Barcelona, donde están estos días sus padres y donde vive su hermano, y lo celebren aquí, aunque no podemos decir cómo irá”, dicen algunos allegados.