JOAN MANUEL SERRAT

Joan Manuel Serrat y un adiós que jamás hubiese querido dar que llegó con una prohibición tajante

El músico lo tiene claro.
jueves, 9 de junio de 2022 · 04:00

Llegó el momento que jamás hubiese querido atravesar. Ni producto de su imaginación, mucho menos en pesadillas. El momento de decir adiós parece estar más cerca para Joan Manuel Serrat, quien dio comienzo a una gira de despedida.

El tour en el que recorrerá toda España es un hecho. El puntapié inicial de este por demás doloroso proceso encuentra anclaje en Murcia. Su capitalina plaza de toros despedirá entre sollozos al más cantor de los poetas.

A paso lento, pero siempre firme, se acerca al micrófono, elevando luego su cabeza, que llegaba al centro del escenario gacha. Surfeando una ola de nostalgia y melancolía, la magia comienza a suceder en vivo y en directo. La música entre las cenizas presagia el epílogo de este memorable capítulo en la vida del músico.

Joan Manuel Serrat
Joan Manuel Serrat, en el inicio del fin, comienza su gira de despedida en España. Fuente: (El Mundo)

Acompañado por su magistral banda, un Joan Manuel Serrat dominado por la ansiedad de los acontecimientos, irrumpió diez minutos antes de la hora prevista para dar un concierto desbordante de excelencia, capaz de levitar sobre el paso del tiempo.

A fin de agradecer personalmente la destacable acogida que el público dio a su interminable repertorio, comienza a transitar reflexivo el final de su camino profesional, ante sus más fieles seguidores que, decididamente, siguen sus pasos y se marchan de su mano, trayendo al presente aquellas perlas del pasado.

Celebrando las bodas de oro inmerso en una profesión que bien supo honrar y enaltecer, Joan Manuel Serrat comenzó “El vicio de cantar” sin dejar disponible localidad alguna. Era de esperarse, nadie quiere estar ausente en lo que se constituye la cita artística obligada del 2022.

Más de seis mil personas ovacionaron a Joan Manuel Serrat en una inolvidable noche en Murcia. Fuente: (La Verdad)

La prohibición de Serrat

Por delante, son varias ciudades que aún lo esperan con los brazos abiertos y el corazón en la mano. De Bilbao a Barcelona, celebrando por última vez junto al cantante aquellos recuerdos compartidos por varias generaciones, atravesadas por un mismo escalofrío.

Lo que ha sido su vida se le escapa de las manos, nada menos que ante 6.000 testigos de una prolífera obra atemporal, incapaz de envejecer. “En unos años podréis decir 'Yo estuve allí'. ¡Lo vi caer! Y dicho esto, se prohíbe toda nostalgia, porque todo es futuro. Gracias, amigos”, concluyó el poeta.

Se prohíbe toda nostalgia, porque todo es futuro.

Transformando cada verso en un pequeño milagro, Joan Manuel Serrat comienza a despedirse de las tablas, aquel lugar devenido en su segundo hogar. Dejando un enorme legado cultural, el más grande finalmente nos dice adiós.

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