Ese tema recurrente que siempre enturbia las vacaciones del Rey Felipe y la Reina Letizia

"Nuevos tiempos", "Monarquía renovada", "Los reyes más pobres de Europa" y otras frases similares, son los títulos que acompañan en ocasiones al Rey Felipe y la Reina Letizia cuando se compara su modus vivendi y gestión administrativa con otros pares europeos, como los Grimaldi en el principado de Mónaco o los grandes duques del principado de Luxemburgo, e incluso los sectores más monárquicos del país aplauden el hecho de que la pareja real eche a andar la institución monárquica al completo con mucho menos recursos de los requeridos por el reinado de Países Bajos. Pero, si miramos con mayor detenimiento, ¿realmente es la pareja real tan austera cómo se proyecta?

Saquemos cuentas, al menos, frente a sus incomparables asignaciones anuales que, si bien son considerablemente bajas frente a los representantes de otras casas, muy pocos españoles podrían acceder a  cifras tan altas en sus cuentas bancarias. De facto, la brecha se ha intensificado luego de que Casa Real decretará un aumento "mínimo" del 1.5% a pesar de que el Rey Felipe, la Reina Letizia y sus hijas tienen sus necesidades básicas cubiertas y no afrontan otros temas colectivos como pagos de vivienda, comida, servicios y transporte.

Esto nos permite abordar otros ítems de interés general que no han sido demasiado esclarecidos por la Zarzuela y tiene que ver, por ejemplo, con los destinos privados escogidos por el Rey Felipe y la Reina Letizia cada año en sus vacaciones estivales.

Medios como "Merca2" no descartan que el clan se embarque hacia Palma de Mallorca para alojarse en el Palacio de Marivent como tradicionalmente sucede en esta época del año, pero los lugares a visitar luego de pisar la isla balear constituyen  un gran misterio, pues no trascienden datos tan puntuales como quién costea este 'retiro necesario' que seguramente no va en hostales sencillos y comidas en chiringuitos de playa. ¿Sale de su propio peculio o se paga con los recaudos de los contribuyentes?

Este siempre es un tema de debate, a pesar de que cualquier suceso nacional de carácter telúrico podría echar para atrás cualquier iniciativa de la pareja. Hay quienes defienden el derecho de los españoles a que el tema no permanezca oculto, especialmente cuando se confirmó que uno de los destinos preferidos, especialmente en el caso del Rey Felipe, eran las islas griegas, gracias a varias fotos difundidas por varios turistas en las que se les podía ver disfrutar de las bondades de estos paradisíacos escenarios, nada solidarios en cuanto a precios de estadía y especialmente en temporada alta.

Luego, otros asuntos surgen a la superficie mediática, como, por ejemplo, el "regalo" de 450 mil euros que recibieron el Rey Felipe y la Consorte por parte del Ministerio de Hacienda: un vehículo blindado para sus traslados oficiales y de alta gama que se une a otros 11 coches de similar estructura; la lujosa embarcación 'Dolce Vita' que usan los reyes y sus hijas en tiempos de veraneo para zurcar las aguas mediterráneas y cuyo alquiler ronda los 32 mil euros a la semana, o los gustos gastronómicos de la familia satisfechos en restaurantes de alta gama y cuyas cuentas a pagar no son aptas para todos los bolsillos. ¿Aparecerán estos gastos reflejados en las declaraciones tributarias del Monarca al cierre de este año 2022?