Andrea Janeiro y Jesulín de Ubrique, una relación signada por una serie de desplantes dolorosos

Más allá del hermetismo que mantiene Andrea Janeiro con el fin de preservar su vida privada, conocidos son los desplantes de su padre, Jesulín de Ubrique, así como también la relación distante que mantiene con toda su familia paterna.

Es por ello que, en reiteradas oportunidades, Belén Esteban denunció públicamente que este clan no trata a Andrea “con un comportamiento adecuado”. Pese a todo esfuerzo por mantener un buen vínculo con su abuela, Carmen Bazán, la relación se enfrió, y la distancia acabó de lapidar lo que había entre ellas debido a actitudes, cuanto menos, cuestionables con su nieta.

La relación entre la hermana de Hugo y Jesulín de Ubrique es prácticamente nula luego de años y años de destratos y gestos feos. Varias muestras de desinterés son las que alejaron irremediablemente a la joven de su padre.

Por ejemplo, en 2015, el torero estuvo junto a María José Campanario en Madrid y no visitaron a la hija de Belén Esteban. Esto mismo se repitió cuando viajó a la ciudad capitalina para participar de “Hay una cosa que te quiero decir”, y no fue capaz de destinar tiempo en ver a la menor en Paracuellos.

Incluso, con total naturalidad, Jesulín de Ubrique llegó a afirmar que en Navidad iría a ver a su hija. Sus declaraciones enfurecieron a Belén Esteban, quien no se calló la boca y disparó: “Decir que igual viene en Navidad… Tiene la suerte de que no me dejan hablar. Si digo los años que hace que no la llama…”

Establecer contacto para saber cómo se encuentra Andrea Janeiro o bien para concretar un encuentro no entraría dentro de las prioridades de Jesulín de Ubrique. Tanto es así, que tampoco se la tiene en cuenta para dar aviso de aquellos eventos familiares de relevancia.

Claro ejemplo de ello tuvo lugar durante la internación de la abuela de la adolescente, Carmen Bazán. Ingresada en el hospital luego de someterse a una operación de cadera, fueron varias las ausencias que hicieron ruido. Una de ellas, la de la hija del diestro. Nadie cogió el teléfono siquiera para ponerla al tanto de lo ocurrido.

Este distanciamiento de la familia Janeiro con Andrea Janeiro resultó más que evidente en el entierro de su abuelo Humberto, padre de Jesulín de Ubrique. La joven prefirió no acudir al acto. La prensa la criticó fuertemente, sin considerar lo que se le estaba exigiendo entonces a la muchacha de 21 años, que siempre ha sido ignorada por esos familiares.

Otra gran revelación de la heredera del matador tuvo lugar en 2014. Julia Janeiro tomaba la comunión y Andrea decidía deliberadamente no asistir. Si bien inicialmente le hacía ilusión acompañar a su hermana menor en su día especial, todo cambió cuando el empresario ganadero y la dentista adelantaron públicamente la presencia de la niña en el evento, algo que le molestó y le hizo cambiar de parecer.

El peor de los desplantes del maestro tiene que ver con una dolorosa diferencia que Jesulín hizo entre sus hijas. Julia Janeiro vive en un piso cuyos gastos corren a cuenta de su padre. Su hermana, claramente no corre con esa misma ventaja. Nuevamente, Belén Esteban estalló de rabia, explicando que “si le ha puesto un piso a una, que también se lo ponga a la otra, pero, vamos, que no pasa nada, pero si no lo digo, reviento”.

“Son tres hijos, yo desde luego todo lo que tengo es de mi hija, todo”, aseguraba entonces aquella mujer que decidió dejar atrás su relación sentimental para comenzar de cero con su beba, con una mano atrás y otra adelante. “¿De qué me estoy quejando? Si es que siempre ha actuado igual”, mostraba su resignación ante una situación injusta que lastima a su pequeña.