La última palabra de la Princesa Leonor que podría separar para siempre al Rey Felipe y al Emérito

Para la familia real, el año 2020 fue sin duda su annus horribilis ante la llegada del coronavirus con el decreto de confinamiento para evitar propagaciones, la inminente salida del Rey Juan Carlos de España ante un país que no daba crédito al conocerse no solo su salida, sino que los únicos en recibirle fueron sus pares en Abu Dabi y además de la decisión del Rey Felipe de renunciar a la herencia de su padre, acción que al parecer también secundó la Princesa Leonor, a fin de dar inicio a la 'operación repudio' y salvaguardar su impoluta imagen de los desmadres financieros y de gestión de su abuelo durante sus casi 40 años de reinado.

Lo que pocos conocen sobre el tema y que el diario catalán "El Nacional" nos aclara al respecto, es que aunque el Rey Felipe renuncie a este derecho sucesorio, no puede suprimir este derecho a la Princesa Leonor y la Infanta Sofía como su descendencia directa porque esto no está contemplado en temas de herencias y así lo refrenda la rama de la abogacía especializada en estas lides (incluso si hablamos de ésta que de por sí ya viene bastante envenenada), así que por lo que sigue y si ninguna de las niñas en el futuro desiste de este beneficio, las infantas Elena y Cristina deberán compartir los aproximadamente 1.800 millones de euros del patrimonio personal del Emérito con la futura heredera al trono y la pequeña Infanta.

Al menos según nos señala el medio citado, a lo único que ha renunciado la primogénita del Rey Felipe, es al tema de aprender el arte de navegar en regatas, una de las actividades deportivas que distingue a los Borbones. Al Rey Juan Carlos ni siquiera sus achaques en rodillas y cadera le impidieron subirse al Bribón 500 en su regreso a Sanxenxo y posiblemente el Rey Felipe le siga los pasos en su próxima visita a Palma de Mallorca, pero la Princesa Leonor no parece interesarle el tema. ¿Qué diría al respecto la recordada Infanta Pilar, quien rechazaba a la Reina Letizia en sus días como Princesa por no saber esquiar? Todo un escandalete familiar habría, sin duda alguna.

Hablando del padre del Rey Felipe y sus familiares, tampoco se espera su presencia en estos días para disfrutar de las bondades de Palma de Mallorca y Sanxenxo mientras prosigan las nuevas investigaciones que adelantan la Fiscalía Anticorrupción y Hacienda por los  supuestos vuelos personales del Rey Emérito con los aviones de la empresa Telefónica.

En cuanto al Rey Felipe, se debe aclarar nuevamente que aún sigue siendo heredero de los millones que aun reposan en las cuentas suizas de su antecesor, pues su renuncia solo se concretará cuando él consigne su voluntad ante las autoridades competentes para anular su vínculo sucesorio con la herencia más turbia de España. Por la Princesa Leonor y su hermana menor, habrá que esperar a que cumplan la mayoría de edad para que también confirmen su voluntad de renunciar a los millones de euros de su abuelo. En temas delicados como este, hay que esperar. Amanecerá y veremos.