La pésima estrategia de Iñaki Urdangarin para imponer a su familia su relación con Ainhoa Armentia

Desde que saltó a los medios el pasado mes de enero el escándalo del año, cuando se descubrió la relación extramarital entre Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia, la pareja ha surcado la indignación generalizada y la controversia con un comportamiento bastante discreto, y comprensible hasta cierto punto, a fin de evitar una escalada mediática mayor. Pero, a través del medio The Objective, se comprobó que el mismo modus operandi persiste con el entorno familiar del vasco, por lo que quedaría descartado que la analista contable haya sido presentada ante su entorno más directo como se destacó en anteriores ocasiones.

A lo largo de estos seis meses, la situación se ha complicado para la 'feliz' pareja, en medio de procedimientos legales para poner fin a sus estados civiles anteriores, dudas entre sus familiares y conocidos, varios rumores circulantes sobre engaños y traiciones, entre otros temas punzantes. Sus más recientes fotos revelan a una pareja extraña, distante, y como si se tratara de una pareja royal, el exduque siempre camina varios pasos delante de la vitoriana, sin manifestaciones de afecto y siempre con un semblante serio entre ellos.

Pero este retrato gris podría cambiar próximamente gracias a uno de los eventos familiares más esperados en el seno de la familia de Iñaki Urdangarin, ya que su sobrino y tocayo Iñaki Flood contraerá matrimonio el próximo 19 de agosto en Estados Unidos y se estima que esta podría ser la excusa perfecta para que tanto el exatleta como Ainhoa Armentia den el paso definitivo y ella quede ratificada como su nueva pareja ante su entorno familiar.

Sin embargo, todavía queda en suspenso el momento más decisivo entre Iñaki Urdangarin y su nuevo interés sentimental, pues ambos coinciden en que el escenario más difícil será cuando cada uno de ellos presente a su pareja frente a sus hijos. Se ha dicho que especialmente los vástagos de Ainhoa Armentia se han llevado la peor parte, al recibir burlas de sus compañeros de clase debido a la situación tan pública que ubicó a la madre de ambos como la tercera discordia entre los exduques de Palma. Tampoco la situación ha sido fácil para los chicos Urdangarin, pues a pesar de que se muestran muy unidos al exdeportista, han trascendido algunos roces con sus hijos Pablo e Irene.

De cara al resto de sus familiares, si Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia deciden asistir al enlace nupcial, esto les pondrá sin dudas en un verdadero aprieto, si se toma en cuenta que durante sus 25 años de matrimonio, la Infanta Cristina desarrolló una gran relación con su familia política, y que fue correspondida con creces, por lo que la idea de alternar a Ainhoa con los Urdangarin podría interpretarse como un espaldarazo a la nueva relación en detrimento de su familiaridad con la Borbón.