El giro definitivo que planea Froilán para dejar de ser el niño terrible de la familia Borbón

El nieto favorito del Rey Juan Carlos, Felipe Froilán, cumplirá este domingo 24 años, evadido de la vida pública y de toda toda probabilidad sobre algún encuentro casual con la prensa. Las cosas han cambiado hoy en día, pues dejó de ser -hasta que se demuestre lo contrario- el niño terrible de los familiares del Rey Emérito.

Aunque para los efectos de la vida mediática siempre será noticia, es cierto que el hijo de Jaime de Marichalar parece preferir la discreción y priorizar su vida personal. Lo último que se pudo saber a través de medios como "El Mundo", es que ha culminado sus estudios universitarios de administración de empresas en el prestigioso centro College for International Studies y se apuntó a unas pasantías con una posible oportunidad laboral en Londres. Este nuevo paso en su vida le generó mucha ilusión; según algunas fuentes cercanas.

Atrás parecen haber quedado sus días de joven juerguista, protagonista de peleas en bares y rompecorazones especialmente. Sus idas y venidas sentimentales con Mar Torres, heredera del emporio de productos alimenticios El Pozo, llegaron a su fin y su supuesta relación con la modelo e instagrammer, Belén Perea, quedó suspendida por el momento. Por ahora, Froilán desea enfocarse en sus proyectos venideros, el amor y el drama pueden esperar.

Sin duda, es un paso atrás a la vida que el joven aristócrata arrastró por años, en el que se volvió tan mediático por los líos en los que se veía involucrado. Ahora, llegó a ser una gran sombra en la vida y proyección de su hermana, Victoria Federica, quien finalmente logró despegar como figura pública del jet set madrileño por su apretada agenda social (recordemos que hace varios días acudió a la fiesta organizada por Off White en Casa Jondal junto a junto a Alba Díaz, hija de Vicky Martin Berrocal) y se iniciará como modelo para la marca Hoss Intropía.

Para Froilán, lo mejor es mantenerse en un serio punto y aparte de los medios, por su interés personal de mantenerse alejado de los problemas y también por temas familiares, tomando en cuenta que la familia Borbón permanece en una nube negra de escándalos. "No quiere ver su intimidad en boca de todos, además es consciente de que puede convertirse en cabeza de turco de los enemigos de la Corona y con su comportamiento perjudica sobre todo a su abuelo, al que adora, por lo que escabullirse de la prensa es la actitud más inteligente", aseguró un conocido bastante próximo a su entorno.