Por este gesto se dice que la Princesa Leonor cada vez más se aleja de la Reina Letizia

Tal como se esperaba, el Rey Felipe y la Reina Letizia junto a sus hijas la Princesa Leonor y la Infanta Sofía han presidido el acto religioso en honor a Santiago Apóstol, patrono de España con una ofrenda entregada en la catedral de Santiago de Compostela, en medio de circunstancias un tanto adversas que dificultaron un poco la permanencia en el recinto durante este acto especial y solemne.

Las altas temperaturas registradas en las últimas semanas por la ola de calor, el humo del botafumeiro y el uso de las mascarillas dentro de la catedral fue razón más que merecida para que tanto la Reina Letizia como sus hijas debieran recurrir al uso del abanico, un complemento poco habitual entre los utilizados por la Monarca y más aún la heredera y su hermana.

De hecho, era la madre de la Princesa Leonor quien daba fe del calor que podría sentirse y respirarse dentro de la catedral mientras se abanicaba varias veces, no podía dejar de mover sus manos y trataba de airear su cabello. En cambio, el resto de su familia se mantenía inamovible frente al altar del recinto donde se celebraban los rituales en honor a Santiago Apóstol.

Sin embargo, las cámaras de medios apostados en el lugar como la revista ¡Hola! pudieron presenciar un cálido momento de complicidad padre e hija entre el Rey Felipe y la Princesa Leonor, quien después del discurso de su padre una vez que este regresó al asiento junto a su futura sucesora, tuvo el gesto de abanicarlo en medio del vaporón en el interior de la iglesia.

Este ha sido un momento bastante peculiar y que de alguna forma rompió con la solemnidad del evento, pero que dió fe de la cercanía y complicidad entre el Rey Felipe y la Princesa Leonor, cada vez más unidos por la institucionalidad, pero, además de ello, por su relación familiar inalterable.