Rocío Carrasco desenmascara una jugada de Amador Mohedano que habría perjudicado a Rocío Jurado

El último concierto de Rocío Jurado fue histórico. Marcó su despedida perpetua de los escenarios. La tonadillera confió en Rocío Carrasco y Fidel Albiac para llevar adelante esta labor, antes de su tratamiento en EEUU. Esta será la premisa del séptimo capítulo de “En el nombre de Rocío”.

Según Rocío Carrasco, esta decisión de su madre fue el detonante que encendió la mecha de la discordia entre ella y Amador Mohedano. Su tío fue el último en enterarse de este proyecto y no pudo ocultar su disgusto. "En un primer momento él reacciona bien, pero intuyo que alguien le comería la cabeza y volvió a la siguiente reunión hirviendo", dijo Rocío. Asimismo, agregó: "Ponía pegas por todo. Terminamos la reunión y él se va despotricando".

La hija de Rocío Jurado recuerda que fue un desencuentro muy agrio. "Me fui detrás de él en buena disposición. Le dije 'si tu preocupación es que salga bien, va a salir todo bien' pero cuando estábamos saliendo me dice ‘tú quieres ver cómo le digo a tu madre que yo no estoy en el proyecto, no lo hace’", dijo. Señaló que después de eso nada fue igual: "'Entra en el dormitorio y se lo dices'. No sé la cara que me vería que se fue. Ahí empieza la tirantez en la relación laboral con él".

Lo otro que dejó claro Rocío Carrasco es que su tío no fue agresivo de ninguna manera, pero la relación sí tuvo un quiebre: "Cuando la opinión viene de un frustrado todo lo que los demás hagan le jode. Yo no tengo la culpa de que Amador sea un frustrado".

No tengo la culpa de que Amador sea un frustrado.

Este capítulo dará de qué hablar, y Rocío Carrasco arremeterá sin pensarlo dos veces contra los dichos de Amador Mohedano: “Que mi madre ha sufrido mucho por mí. No Amador. Mi madre sufría y lloraba mucho en un camerino por tu culpa. De repente se te iba la mano con lo que bebías, otro día el sonido no funcionaba, otro que había que pagar una multa, de repente se enteraba que el guitarrista no había cobrado. Pasaban muchas cosas".

Lloraba mucho en un camerino por tu culpa.