Pese a que ya pasaran los días más turbulentos, Olga Moreno no deja de ser un personaje muy atractivo para la prensa. Su historia con Antonio David Flores la mantendrá siempre en la palestra y también los gestos con los que ella se desenvuelve. Decimos esto porque, aunque ella dijera en reiteradas oportunidades que no se siente cómoda ante las cámaras, de vez en cuando accede a ser parte de un plató y, cuando no, de todos modos, mueve fichas en sus redes sociales.

Al igual que Rocío Carrasco, ha tenido que salir de una situación compleja a fuerza de voluntad y valiéndose de personas de confianza, Olga Moreno ha tenido que enfrentarse al carácter mediático que adquirió su separación de Antonio David Flores. Y es que ese evento tuvo lugar justo meses después de que ella saliera de “Supervivientes” como ganadora y gritando a los cuatro vientos que adoraba a su marido, también meses después de que Rociíto anunciara que Olga tarde o temprano descubriría que “el ser” no era todo lo bueno que ella creía.

La heredera universal logró dejar atrás a Antonio David Flores gracias al clan Campos y a Fidel Albiac y la empresaria de moda también se ha apoyado en personas para lograr comprender que su proyecto familiar ya no sería el que imaginó. Posiblemente también acudió a algún tipo de terapia, pero las personas que la contuvieron fueron mucho más valiosas ya que también se enfrentaron a sus detractores.

Los ángeles de la guarda de Olga Moreno

En el mundo mediático no contamos con muchos ejemplos de familias ejemplares, pero la madre postiza de Rocío Flores parece ser la excepción a la regla. Olga Moreno se ha apoyado en sus hermanos para superar a Antonio David Flores y enfrentar el estallido mediático del que fue protagonista. Todos son igualmente importantes, pero dos de ellos quizás estarían interesadas en sumarse a la crónica del corazón pues ya han dado varias señales de sentirse más cómodos que Olga frente a las cámaras.

Raquel Moreno es la hermana de Olga Moreno a quien podríamos definir como a su máxima defensora. Es ella quien le responde a cada detractor de su consanguínea en redes sociales y quien ha demostrado que no le tiene miedo a quienes intenten amedrentarla. Rosa es la otra que ha cobrado fama, pero por sus labores como influencer. Es bailarina y lleva una vida muy cuidada, dos tópicos que utiliza muy a menudo para mantener entretenida a su comunidad. El resto aparentemente no tiene intenciones de dejar el anonimato, pero son igualmente importantes para la sevillana.