Bertín Osborne lanza un mensaje que paralizaría el corazón de Fabiola Martínez

Bertín Osborne ha abierto su corazón para hablar de varios de sus secretos en su vida personal, y muchos temas que en la actualidad le incomodan. El presentador participó en un formato de preguntas y respuestas para El mundo y terminó confesando varios secretos de cómo lleva su vida personal en la actualidad, un año después de haber anunciado su ruptura con Fabiola Martínez.

Los cambios parecen ser ineludibles en su vida personal, pero el presentador disfruta de su nueva vida, poniendo su ímpetu de por medio, y sin abandonar las tareas que más le apasionan: la música, el tiempo de ocio y la animación. En la entrevista, recuerda en especial el año 1981, el año en el que comenzó a trabajar vendiendo vinos "era un pipiolo y llevaba dos o tres años en Rumasa vendiendo vino. Es un buen negocio porque el que no vendes te lo bebes", comentaba en tono jocoso Bertín Osborne. 

Aquí se ubica en la política, opina sobre la guerra, y lamenta los tiempos actuales que se viven en el continente. El exmarido de Fabiola Martínez cree que podría haber una transición en el país. "Sería posible porque sigue habiendo una mayoría enorme de buena gente en este país. Eso sí que es una mayoría absoluta. Pero también hay otros que viven en el rencor. Creo que hoy en día sería más complicado, pero se podría hacer porque hay una inmensa mayoría de gente de buena condición", comentó. 

Me preocupa en general el futuro cercano y la educación de los niños.

Lo convulso de los tiempos y el futuro preocupan a Bertín Osborne, que piensa en sus hijos y en sus nietos, sobre todo en su hijo Carlitos, quien demanda cuidados especiales, y cuya atención comparte con Fabiola Martínez en la actualidad.

"(¿Le preocupa el futuro?) Horriblemente. El futuro de mis hijos, mis hijas, mis nietos... De todos. El qué será de ellos dentro de 20 años, que igual yo ya no lo veré... Y me da horror el futuro de mi hijo Kike, es el que más me preocupa porque no tendrá autonomía para sacar su vida adelante. Yo no estaré, pero estará su madre que espero que dure más que yo, estarán sus hermanos, que ojalá se ocupen de él... Pero me preocupa en general el futuro cercano y la educación de los niños", confesó el presentador para luego recurrir a una analogía que le parece preocupante.

"Saben cuántos metros tiene la fosa más profunda de Europa y no saben quién era Carlos III. Están todo el día metidos en internet pero no leen. Vamos a acabar como los americanos, un país que no tiene ningún tipo de cultura", zanjó.