Lo peor ya pasó y Belén Esteban festeja. La colaboradora vive un verano inolvidable después de dar la batalla por varios meses. Tras su caída en el plató de “Sálvame”, cinco visitas al quirófano y alteraciones de su salud mental, está viviendo al máximo. Ya dejó las muletas y le dedica el tiempo a su esposo Miguel Marcos, quien fue un pilar importante en su recuperación.

La de Paracuellos reapareció en el mes de julio en la televisión. Habló con sus compañeros sobre cómo se sintió este tiempo, cómo venció los demonios, y aseguró que tuvo que enfrentar no solo la gravísima lesión en su pierna si no que también tuvieron que quitarle un pólipo benigno del que no tenía noticias hasta ese momento.

"Quiero decir a todo el mundo que las mujeres se tienen que hacer sus revisiones porque hubiera sido peor. Que no tengan miedos porque los médicos nos ayudan mucho y tenemos que tener confianza, cosa que yo no tenía", comentó Belén Esteban, pero sin dudas, lo que más le afectó fu su lado anímico y emocional.

Tenemos que tener confianza, cosa que yo no tenía.

Hace poco la colaboradora compartió por las redes sociales una foto de sus vacaciones con Miguel Marcos. La pareja se demuestra su afecto en una piscina con el atardecer como escenario principal. En el texto colocó: “Forever”.

Miguel Marcos, el gran apoyo de Belén

Miguel Marcos estuvo presente todo el tiempo. Después de ese letargo merecían unas vacaciones. Belén Esteban contó en su momento: "Depresión no tengo, pero sí tengo tristeza constantemente. Sé que hay cosas mejores, pero también peores. Mi cabeza me ha fallado esta vez y estoy con ayuda que me está viniendo muy bien", dijo la madre de Andrea Janeiro. Hoy el matrimonio la pasa bien. Por más tardes románticas en la vida.

Sí tengo tristeza constantemente.