La Infanta Elena y Cristina no están de luto: su escapada y fiestón en Portugal del que todos hablan

A pesar de la gran conmoción que trajo el fallecimiento de la Reina Isabel al Reino Unido, los países que conforman la Commonwealth y el resto del mundo desde el pasado jueves 8 de septiembre, las actividades propias entre las distintas casas reinantes no se detienen y esto es algo que la querida Monarca refrendaría en defensa de estas instituciones, es por ello que en Dinamarca es la Reina Margarita quien celebra sus 50 años de reinado, en Bélgica, la Princesa María Laura contrajo matrimonio y en cuanto a España, la Infanta Elena y la Infanta Cristina se van de escapada de fin de semana a Portugal.

La exclusiva del portal Look nos lo confirma. Las hermanas fueron captadas en la zona de Alentejo, ubicado en la ciudad de Álcacer do Sal.  La razón para ello fue su asistencia a la boda de la hija de unos amigos en común, se trata de la aristócrata Carla Velge Urquijo, quien contrajo nupcias el pasado sábado con António Velho Palma en la Iglesia de Santiago.

El vínculo entre la socialité belga-española con las infantas, tiene cierto tinte histórico, pues la joven es bisnieta del marqués de Amurr,  Luís Cayetano de Urquijo, quien, en sus tiempo, ejerció como Mayordomo de Semana del Rey Alfonso XIII. De allí en más, tanto los Borbones como los poseedores del marquesado, han sostenido una cercana amistad a través de los años. Además, por medio de Look se ha podido conocer que la Infanta Elena fue una de las flamantes invitadas que firmó en calidad de testigo de esta esperada boda.

En cuanto a la estancia de la Duquesa de Lugo  y la Infanta Cristina en el país vecino, se conoce que arribaron el pasado viernes y se alojaron en una fantástica propiedad de que la familia de la novia poseen en Comporta, uno de los destinos vacacionales preferidos del jet set internacional. Allí también se celebró el tradicional banquete y se pudo observar a las hermanas, totalmente ajenas a las cámaras y distendidas compartiendo entre los invitados.

Es en estas ocasiones especiales en las que se puede apreciar a la Infanta Elena y a la Infanta Cristina en su elemento, es decir, como cualquier otro invitado y sin llamar demasiado la atención, cuestión que en el día a día les resulta completamente imposible, pues en España son blanco de miradas curiosas, las luces de las cámaras y de todo aquello que conlleva el hecho de ser familiares directas del Rey Felipe. Todo lo que hacen o dejan de hacer es tema de interés público, por lo que este tipo de actividades privadas suelen ser algo que siempre agradecen.