La frase de Isa Pantoja que sentencia su relación con Irene Rosales

Isa Pantoja y Kiko Rivera ya llevan un año sin cruzar palabras. El DJ rompió la lealtad entre hermanos al desvelar que le puso la mano encima porque la sorprendió intentando suicidarse, una confesión que Isa no dejó pasar por debajo de la mesa y que hoy la mantiene distanciada también de su cuñada.

La colaboradora no se confía y tampoco está preparada emocionalmente para entablar una conversación con su hermano y su cuñada. Teme que actúen impulsivamente. Eso sí, aclara que ella le desea todo lo mejor a Kiko Rivera y que salga a flote de sus problemas. Sin embargo, ese mensaje no se extiende a Irene Rosales.

Isa no puede entender cómo su cuñada no duda en reprochar las acciones de su marido y de frenarlo a tiempo cuando dice barbaridades de su familia, además de los entuertos que existen en la no mediación de Kiko Rivera con su madre y ella.

Hace poco en el Deluxe, Isa Pantoja reconoció los enfrentamientos que mantienen entre ellos y de la cancelada relación con Irene Rosales. “Ni públicamente ni en privado ha tenido un gesto de acercamiento conmigo. He echado en falta un poco de empatía. A mi cuñada Irene la respeto, pero no quiero que se interponga entre mi hermano y yo”, dijo.

He echado en falta un poco de empatía.

En todo momento, la hija de la tonadillera es crítica con Irene Rosales. Sus comportamientos para que el clima cambie entre la familia, son nulos. Por ahora, ella prefiere mantener la distancia. “Mi relación está bien, normal, como siempre. No tenemos relación, así que bien. Para mí bien porque no hay una guerra ahora mismo abierta... Nos ignoramos mutuamente y mi vida sigue igual”, señaló.

No tenemos relación, así que bien.

Una visita a Cantora

Cada vez que Isa Pantoja va a visitar a su madre a Cantora, no se siente bien. Es un lugar que le resulta incómodo y con una alta carga de energía negativa. Confesó que le da pesar asistir, pero que ya su madre tiene teléfono y se comunican cuando les da la gana.