La estocada a la Infanta Cristina que justifica la felicidad de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia

Las recientes fotos que la revista "Semana" publicó en exclusiva en las que se podía apreciar a Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia en Formentera, a puro derroche de amor y complicidad, continúan dando de qué hablar. Un verdadero revuelo tuvo lugar hace algunas horas para el equipo de "El Programa de Ana Rosa": una de sus reporteras se desplazó hasta Vitoria y siguió de cerca la pista de la analista contable, quien se mostró muy sonriente y pletórica ante las cámaras de "Chance" en su regreso al trabajo.

Aunque parece que la intención era sorprenderla, sorprendidos más bien quedaron en el set gracias al repentino descubrimiento con el que se topó la enviada al recoger las impresiones de varios vecinos en las inmediaciones de la residencia de la madre del exatleta, Claire Liebart.

La periodista Letizia Requejo fue quien extendió a su compañero en estudio, Joaquín Prat, la noticia del momento: "Llevamos toda la mañana donde vive su madre y los vecinos comentan que tienen la sensación de que el exduque de Palma posiblemente ya no viva aquí, que viene mucho a ver a su madre y que hace 10 días que no se le ve".

Los vecinos comentan que tienen la sensación de que el exduque de Palma posiblemente ya no viva aquí.

Ante el asombro de sus compañeros, la mediática añadió algunos datos más que podrían dar luces sobre los últimos hechos que han rodeado a Iñaki Urdangarin y a Ainhoa Armentia, en las últimas semanas. "Se baraja la posibilidad de que la nueva pareja podría haber alquilado un piso y un amigo de Iñaki nos dice que a principio de verano la pareja hizo un crucero fuera de España para huir de todas las polémicas".

De ser ciertas esas aproximaciones, entonces explicaría el buen ánimo con el que fue vista Ainhoa, a tempranas horas de la mañana: en su mejor versión, mucho más sonriente y amable con la prensa que en ocasiones anteriores. Después de todo, la pareja habría conseguido avanzar ante un escenario de dudas y especulaciones en el que la situación económica del vasco les impedía concretar algunos planes conjuntos. No obstante, parece que la situación actual mejora poco a poco, aunque de forma bastante insólita.