María Teresa Campos es una de las figuras más respetables y honorables en los medios de comunicación. La madre de Terelu Campos y Carmen Borrego con el paso de los años dejó demostrado el motivo por el cual su nombre siempre estará en las primeras líneas: su profesionalismo. 

Durante los últimos años, la vida de la comunicadora cambió por completo, alejada de la televisión y viviendo en un piso en Aravaca totalmente diferente a su hogar de décadas como lo fue el de Las Rozas en Molino de la Hoz, la progenitora de Terelu Campos se encuentra transitando por sus horas más bajas, al menos, eso relatan sus allegados quienes se mantienen preocupados por su estado de salud. 

Ella no necesitaba nada, era independiente en todos los aspectos. Y cuando se hacen más mayores, esa independencia que tenía mi madre, lógicamente, no la tiene. 

María Teresa Campos y su preocupante estado anímico

Carmen Borrego fue la encargada de confirmar en “Sálvame” lo que muchos sospechaban sobre el presente anímico de María Teresa Campos. La presentadora a sus 81 años ya no goza del estado físico y mental de años anteriores, motivo por el cual, como no podía ser de otra manera, sus herederas son las encargadas de su cuidado, tal y como lo expresó la colaboradora días atrás. 

“He tenido una madre que ha trabajado mucho, que ha tenido una vida muy llena de muchas cosas y cuando eso se va apagando te queda la figura de una madre. En este momento nos corresponde a todos devolver todo el amor que nos ha dado”, fueron las palabras de la hija de María Teresa Campos. Sin embargo, la propia periodista quiso llevar un poco de calma a sus fieles seguidores comunicando que “podría encontrarse mejor, pero está pasable”. Sin dudas, una mujer que luchará hasta el último de sus días. 

El verano va bien, y ahora nos venimos a Madrid donde está Gustavo. Así es mejor. 

María Teresa Campos, una trayectoria inigualable 

María Teresa Campos nació en 1941 en Málaga. La licenciada en Filosofía y Letras es por excelencia una de las profesionales más destacadas del país, siempre fiel a sus principios y sin temor al qué dirán.