IÑAKI URDANGARIN
Los motivos por los que el Rey Felipe rompió toda relación con Iñaki Urdangarin
El hecho sería en una fiesta.
La docuserie “Cristina de Borbón, rota de amor” genera más interrogantes que respuestas. Algunos comparten que se quiere convertir a la infanta Cristina en la víctima después de la ruptura con Iñaki Urdangarin. Sin embargo, otros suponen que no hay verdugos si no dos adultos responsables de su situación.
En el capítulo más reciente la historia se traslada al año 2008. El exduque estaba por cumplir los 40 años y la infanta Cristina preparaba una fiesta sorpresa. El Rey Felipe y Reina Letizia estaban invitados a la celebración en el palacete de Pedralbes, hogar de la Infanta y sus hijos.
En medio de la festividad se produce una conversación que no dejó indiferente al emérito. Estaban reunidos varios invitados e Iñaki Urdangarin suelta que le cuesta mucho mantener la casa, ubicada en uno de los barrios donde habitan las grandes fortunas financieras de Barcelona y de personalidades del mundo artístico como Shakira o Joan Manuel Serrat.
El Rey Felipe al escuchar la queja del exduque le dice: “¡Pues no habértela comprado!”. Desde ese momento las relaciones entre ellos se enfriaron, luego vinieron los escándalos como el Caso Nóos hasta que finalmente los cuñados rompieron la relación.
Y no fue para menos el comentario del Rey Felipe. Los entonces duques de Palma llevaban un estilo de vida muy lujoso. Solamente la propiedad de Pedralbes tenía tres plantas sobre una superficie de 1.000 metros cuadrados, piscina con agua de mar, bodega, cancha de tenis, ascensor, escaleras exteriores y un bonito terreno ajardinado de 2.000 metros cuadrados, con todas las medidas de seguridad.
Desde ese momento y los venideros casos de corrupción de Iñaki Urdangarin, el Rey Felipe evitó coincidir con su cuñado, como aquel día cuando el Rey Juan Carlos fue hospitalizado en noviembre de 2012.
La ruptura definitiva
En 2014, durante la celebración del 50 aniversario de la muerte del rey Pablo de Grecia, padre de la Reina Sofía, el Rey Felipe y Reina Letizia apenas le dirigieron la palabra a la infanta Cristina. Entonces, ya se decía que su sospecha sobre los negocios corruptos de Iñaki Urdangarin venía de largo.
