Clara Chía (23 años) ha pasado de ser una auténtica desconocida a la peor villana de los cuentos en un santiamén. Y es que no solamente España habla de ella, sino todo el mundo. La música de Shakira (45 años) se escucha en cientos de países, pero a eso hay que sumarle la popularidad de Gerard Piqué (35 años) y el alcance que le dio al tema la canción producida por Bizarrap (24 años), el artista argentino. Nada de eso es gratuito.

Desde que la cantante lanzó su última canción, Clara ha perdido toda la tranquilidad de su vida. Y es que ni siquiera tuvo la posibilidad de refugiarse en los brazos de su pareja, ya que enseguida comenzaron los rumores de que él le había sido desleal con otra chica. De este modo, el cuento de hadas se disolvía.

La exposición mediática ha hecho que los usuarios de redes sociales se vuelquen a criticar a Clara Chía de manera cruel. Tanto en su perfil personal como en el del futbolista se ven comentarios que no solo replican las frases más ácidas de Shakira, sino que además las potencian. Por ejemplo, un internauta aseguró que Clara ni siquiera es un Twingo, ya que se parece más a un triciclo. Ese detalle da una idea bastante acabada de cuál es el panorama.

Clara Chía necesita ayuda de especialistas para volver a la normalidad

Según se informó en “Fiesta” y otros portales digitales, Clara Chía pasó las últimas semanas refugiada en casa de sus padres y luego acudió al Hospital Quirónsalud de Barcelona tras haber sufrido un ataque de ansiedad. No hay más detalles al respecto, pero esa información es suficiente para comprender que no es fácil afrontar las consecuencias de ser la nueva novia de Gerard Piqué.

Ha necesitado asistencia a otros niveles más especiales, de expertos.

Es importante recordar que Clara Chía trabaja en una de las empresas de su chico y eso quizás le permite algunas licencias. Por ejemplo, podría trabajar desde su casa o no ser tan estricta con el cumplimiento de los horarios en estas jornadas en las que toda su cotidianeidad está revuelta. Mientras tanto, Shakira disfruta de su éxito.

El hombre de las polémicas

Gerard Piqué pasó de ser un ídolo deportivo al ejemplo perfecto de todo lo que no debe hacer un hombre comprometido. Su perfil profesional se ha visto seriamente afectado tras la ruptura con Shakira, pero él no parece avergonzado.