Falleció Paco Rabanne, todas las razones por las que la moda estará de luto

Quienes se salen de la norma corren dos riesgos: o son recordados por toda la eternidad gracias a su atrevimiento, o bien caen en el ocaso y en las garras de la burla. Paco Rabanne, por supuesto, pertenece al primer grupo y no hay nadie que pueda discutirlo. Fue capaz de darle un giro a la moda incluyendo productos insólitos, pero no solo por eso se lo recordará siempre.

Según ha informado Telva, falleció en su casa ubicada en noroeste de Francia. Sus últimos años los vivió allí, descansando y disfrutando del fruto de tantos años de trabajo. No hay detalles en relación a las causas, pero esos son datos que poco importan cuando se piensa en su trayectoria, una que dejara huella para siempre y también angustia en quienes supieron apreciar su estilo cuando todavía estaba entre nosotros.

El artista era hijo de una modista y de un coronel de las fuerzas republicanas que falleció a manos del franquismo. Por supuesto, de su madre heredó la pasión por la costura y él mismo dijo alguna vez que fue su padre quien le enseñó a respetar la belleza de las mujeres. En ese sentido, una de sus frases más célebres es que no tenía musas, sino que prefería inspirarse en quienes veía por la calle, es decir, mujeres comunes y corrientes.

El sello distintivo de Paco Rabanne

Paco Rabanne fue un diseñador futurista y en sus composiciones se destacó el uso de placas rhodoid o de pequeñas piezas metálicas que no se colocaban como accesorios o decoraciones, sino que reemplazaban a la tela. El resultado de sus vestidos era espectacular y, por aquel entonces (en la década de 1960) parecía que su intención era vestir a mujeres que no eran de su época. Hoy esos elementos están plasmados en muchas colecciones de muchas firmas.

Antes de destacarse como diseñador de modas, el nacido en Pasajes se consagró como arquitecto y artesano. Sus primeros pasos en la industria los dio de la mano de Nina Ricci, Pierre Cardin o Givenchy, para quien creaba piezas accesorias y/o de fantasía. Afortunadamente un buen día decidió que el mundo merecía una colección creada íntegramente por él y fue entonces que se lanzó al ruedo.

Lo más parecido a un metalúrgico

Quienes conocieron a Paco Rabanne aseguran que, si no se hubiese dedicado a la moda, bien podría haber sido un herrero. Sentía una atracción especial por el metal a tal punto que lo hizo su sello distintivo.