En la emisión dedicada por “Lazos de Sangre” a la vida y obra de Camarón de la Isla fueron muchos los amigos y allegados que quisieron dejar sus impresiones de los momentos vividos juntos y uno de los testimonios más llamativos fue el de María José Monge, la hija secreta del artista.

Siempre se ha dicho que Camarón de la Isla había tenido solo cuatro hijos, todos nacidos de su matrimonio con La Chispa. Pero durante uno de los pasajes del programa, fue María José Monge la que contó parte de su vida, que se ha mantenido siempre alejada de los medios y sin demasiada relación con el nombre de su padre.

"He vivido en Madrid y luego en Barcelona, siempre con la familia de mi madre", ha iniciado su aparición María José Monge en el documental.

Luego se tomó unos minutos para describir la relación que tuvo su padre con su madre, mucho antes de que conociera y formara una familia con La Chispa. "Eran jóvenes, se conocieron en fiestas y reuniones con amigos. Así comenzó todo", ha explicado.

El día que la hija secreta de Camarón consiguió su apellido

Durante el programa, la mujer ha contado que recién conoció al resto de sus hermanos cuando alcanzó la mayoría de edad. Fue cuando asistió en Badalona al velatorio del artista, para acompañar a la familia en este trago amargo.

Pese a su bajo perfil, María José Monge ha confesado que siempre tuvo un cálido gesto por parte de sus hermanos y La Chispa. De hecho, la exesposa de Camarón de la Isla ha admitido que, aunque en un principio se llamaba María José Reñaga, finalmente, a los 18 años, cumplieron el deseo del intérprete de "Como el agua", de que llevara su apellido al igual que sus otros hijos.

"Cuando él nos dejó, arreglamos los papeles y, con la ayuda de un amigo mío que estaba en Badalona, le pusimos a la niña el nombre de María José Monge Regaña", había recordado La Chispa.

Otro de los momentos emotivos de la entrevista llegó cuando María José Monge mostró un tatuaje que se había hecho en homenaje a su padre. "Este era el tatuaje de mi padre, y me lo hice hace unos 5 o 6 años, no hace mucho. Lo hice porque me gustaba", ha manifestado sin poder ocultar el orgullo que sentía.